How to Save a Life - HYEWON

Epílogo

"¡Mamá, mami está asustando a la bebé otra vez!" Se queja mi hija de seis años, Hyunjin.

Con un suspiro cansado, dirijo mi atención a la culpable y entrecierro los ojos hacia ella. "Que Dios me ayude, Chaewon, si haces llorar a la bebé. Te reto".

Ella sonríe descaradamente y me guiña un ojo. "Relájate, Hye. Ella no llorará. Yerim ama las caras que hago. A diferencia de ustedes dos".

Y fiel a sus palabras, Yerim comienza a reírse de las caras tontas que hace su madre. No pude evitar la sonrisa que se formó en mi propia cara. Chaewon levanta a la bebé y la acuna suavemente.

"Por favor, no la dejes caer, mami". Hyunjin dice preocupada con los ojos muy abiertos y Chaewon jadea muy dramáticamente.

"La falta de confianza que tienes en mí, joven. Me lastima".

"No tanto como te lastimaré si no escuchas a Hyunjin y dejas caer a la bebé".

Chaewon y yo salimos durante cinco años seguidos. Tuvimos que separarnos debido a nuestros diferentes cursos educativos y pudimos reunirnos solo durante las vacaciones. La relación a larga distancia demostró ser una hazaña, pero no era nada que no pudiéramos conquistar y, al final, valió la pena. Sabía que quería pasar el resto de mi vida con la imbécil parada frente a mí, a pesar de que a veces podía ser inmadura e infantil.

"Ah, por cierto cariño, Jiwoo y Sooyoung vendrán a cenar esta noche". Hyunjin comenzó a saltar arriba y abajo ante la mención de sus tías favoritas. Aunque tomó más tiempo de lo que esperábamos, Jiwoo y Sooyoung finalmente se casaron. No es que no lo hayamos predicho de todos modos. "Puedo cocinar si quieres"

"Eres un ángel, pero no quiero quedarme sin casa". Le respondí y ella se echó a reír, dirigiéndose hacia mí. "Te amo". Dije y le sonreí mientras me rodeaba con un brazo en un abrazo lateral.

"Te amo más Hyejoo".

"¡Hagan espacio para mí!" Hyunjin dijo con entusiasmo y se unió a nuestra incómoda sesión de abrazos en el comedor.

Esto es lo que me diste Yerim. Si no fuera por ti, nunca habría conocido a Chaewon. Me dejaste atrás, pero no me dejaste sola y por eso, siempre estaré en deuda contigo. Sigues siendo mi mejor amiga, Yerim. Ese título siempre será tuyo, no importa quién entre en mi vida y quién se vaya.

Me enseñaste muchas cosas. Me enseñaste a creer que siempre habrá cosas buenas por venir. Me enseñaste a aceptar las cosas que no podía cambiar. Me enseñaste que la amistad es poderosa y es eterna. Pero, sobre todo, me enseñaste que está bien si no sé cómo salvar una vida.

Acurrucadas en una esquina de nuestro comedor, finalmente puedo decir que lo logré. Finalmente completé nuestra lista de deseos, Yerim. Encontré mi felicidad.

Y espero que hayas encontrado la tuya.

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Aunque sea mi historia siempre que leo el final me pongo sad jaja

En fin, espero que les haya gustado! Nos leemos en alguna otra historia.