El Día Después

Sobrevivir es la Clave

La rubia corrió tan rápido como pudo, al entrar a lo que era su hogar y al mismo tiempo las ruinas de la secundaria, vio que Sarah trataba de cubrir a Riley con lo poco que tenían, al tocarle la frente al castaña vio con espanto que estaba hirviendo en fiebre.

-LUCAS!!! Qué tenemos en las medicinas?

El chico revisó un viejo botiquín donde habían juntado todas las medicinas que habían podido encontrar en las áreas de la escuela a donde poco a poco habían podido ir llegando.

-Pero ¿cómo sabrás que ponerle? - preguntó Sarah

Sin decir nada Maya removió el contenido hasta que encontró un pequeño frasco.

-Penicilina...

Sacando una de las pocas jeringas que había la preparó. Luego volteó a donde Lucas y Farkle observaban.

-Quieren por favor darse vuelta pervertidos?

Sonrojados los chicos obedecieron mientras Maya le subía la falta a la castaña para poder inyectarla.

-Listo... por favor Riley... tienes que recuperarte...

Maya estaba cuidando a Riley que comenzaba a mejorar cuando Lucas entró con una lámpara nueva, cosas de comer que no había visto en mucho tiempo y algo de ropa.

-Lucas... de donde...

El chico sonrió

-Farkle encontró como salir... y trajimos esto...

-Espera... ¿podemos salir? Necesito ir a casa y

-Maya... todo está en ruinas... - la interrumpió Lucas con tristeza

-q... quieres decir...

-Farkle y yo... fuimos... y no hay nada...

Maya sintió las lágrimas correr por sus mejillas mientras veía a Riley profundamente dormida con su cabeza en su regazo.

-Sabes... Riley tiene la esperanza de que... de que... porque tuvimos que sobrevivir Lucas? No voy a soportar verla cuando se entere...

-Vamos a estar bien... no será fácil pero vamos a estar bien...

Dos días después Maya observó a su mejor amiga mientras observaba las ruinas de lo que había sido no solo su casa sino todo el vecindario, sin embargo lo que preocupaba a la rubia adolescente era la inexpresividad de su mejor amiga.

-Preciosa... si necesitas llorar...

-Estoy bien Maya...

Al volver a su refugio la castaña solo se sentó en un rincón sin decir una sola palabra, Maya fue a llevarle de comer.

-Te traje un chocolate... no fue fácil conseguirlo pero

-no lo quiero...

Los ojos de Maya se abrieron como platos, que Riley desdeñara un chocolate (que era de las cosas que más amaba en el mundo era algo grave).

-Preciosa tienes

-Ya basta... no soy una rata para quedarme metida aquí, estoy sola en el mundo no? Mis padres, mi tío, mi hermano, todos están muertos...

-Pe...

Tomando una vieja cobija la castaña se recostó en el piso.

-Buenas noches Maya...

La rubia estaba boquiabierta mientras veía a su mejor amiga darle la espalda, sin saber que hacer se fue al rincón que ocupaba y se quedó observándola hasta que ella misma se quedó dormida. Lo que Maya no notó fue que a mitad de la noche Riley se levantó y juntando las pocas cosas que tenía las puso en su mochila y observó al grupo que dormía tranquilamente.

-Tengo miedo... pero no voy a ser una carga para nadie...

En silencio caminó por los pasillos y llegó al túnel que les permitía salir al exterior, sabía que no podía estar mucho tiempo afuera pues la radiación que aún existía le haría daño así que comenzó a caminar en busca de un refugio, no supo cómo pero llegó a donde antes había estado Topanga's, moviendo algunos escombros pudo entrar, quedaba claro que nadie había estado allí en meses, todo estaba lleno de polvo, entró a lo que antes era la cocina, dada la falta de energía eléctrica todo lo que era perecedero estaba totalmente echado a perder, pero para su suerte encontró una caja donde había algunas galletas, estaban rancias y duras pero era eso o dormir con el estómago vacío. No se había preocupado por el agua porque se había llevado dos botellas de lo que tenían en la escuela, pero sabía que tendría que encontrar una fuente, luego de acomodarse en una de las bancas se quedó dormida de nuevo. En la escuela el amanecer no fue grato, Maya casi se volvió loca cuando no vio a su mejor amiga, lo primero que se le ocurrió fue sacudir a Lucas.

-DESPIERTA HUCKLEBERRY MALDICIÓN!!! RILEY NO ESTÁ!!!!

El chico despertó sobresaltado, Farkle y Sarah se unieron a ellos.

-Saldremos a buscarla, es muy peligroso que esté sola afuera - sentenció Lucas

En las ruinas de Topanga's Riley despertó. De nuevo su desayuno fueron galletas rancias y un poco de agua. No sabía a dónde iría pero de lo que estaba segura era de que haría lo posible por cuidarse ella misma.

-Estoy sola... y no voy a ser una carga para nadie...

El frío la sacó de sus pensamientos y se cubrió con una de las mantas, juntando sus pocas posesiones salió de nuevo a la calle, estaba nevando y un viento frío le golpeó la cara de inmediato. Apenas se escuchaban ruidos a la distancia, tratando de mantenerse caliente con la manta y caminando sin rumbo no notó que no estaba sola. Mientras tanto Maya y Lucas caminaban por las calles vacías de lo que una vez fue la ciudad de Nueva York...

-Maldita sea Riley a donde fuiste...

-La encontraremos Maya, te lo prometo - agregó Lucas

-Huckleberry si algo le pasa no me lo voy a perdonar nunca... ¿entiendes? Nunca...

Siendo incapaz de soportar más el frío y la nieve la castaña buscó un refugio, sin darse cuenta había llegado a las ruinas del edificio donde una vez estuvo su casa, encontrando una ventana rota entró en las ruinas y buscó un lugar para guardarse del frío.

-puedo... hacerlo... puedo... salir adelante... sola...

Según su reloj era pasado mediodía, había estado caminando cuatro horas y el frío y la oscuridad la hacían sentir como si hubiera caminado una semana. Sacando un paquete de galletas rancias se dispuso a comer algo, pero su paz estaba por terminar, la adolescente se quedó de una pieza cuando vio dos figuras frente a ella...

-Vaya vaya... que tenemos aquí? - dijo uno de los dos hombres

-Comida... y diversión...

Continuará...