for the barista || markhyuck || (8)

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— ¿Por qué nos dirigimos al Starbucks otra vez? — preguntó Jeno mientras intentaba seguir el ritmo de Donghyuck y Renjun. Era raro que ambos caminaran más rápido que él cuando era él quien tenía las piernas más largas — A Renjun ni siquiera le gusta el café —

— Starbucks no es café — espetó Donghyuck, caminando aún más rápido para adelantar a Renjun, haciendo que Jeno pusiera los ojos en blanco — Y vamos a Starbucks para ayudarme a redimirme —

La mano de Renjun se posó primero en la puerta y la empujó para abrirla con una mirada de suficiencia mientras Donghyuck se quejaba:

— ¡No es justo! — señaló con el pulgar hacia atrás a Jeno, que entró tras él — Jeno me distrajo —

Ignorando a Donghyuck, Renjun hizo un gesto con la mano hacia el mostrador donde estaba Mark.

— El perdedor pide y paga —

— Me parece bien — apoyó Jeno a Renjun al instante — ¿Le digo a Jaemin que venga aquí cuando termine su clase? —

— Sí — dijo Renjun al mismo tiempo que Donghyuck decía — No — Jeno sacó su teléfono para enviar un texto a Jaemin de todos modos.

Soplando un beso a Donghyuck, Renjun dio su pedido: un chocolate helado, "algo normal y no del mundo mágico, por favor", mientras que Jeno pidió té chai y un pastel de red velvet, y se ofreció a esperar las bebidas mientras Donghyuck las pedía. Renjun le hizo una mueca a Jeno, pero finalmente cedió y se fue a buscarles un asiento.

Donghyuck envió a Jeno una mirada suplicante, pero éste se limitó a negar con la cabeza, haciendo que Donghyuck frunciera el ceño. De mala gana, muy de mala gana, arrastró los pies hasta el mostrador.

— ¡Oh, eres tú otra vez! — Mark sonrió en cuanto vio a Donghyuck de pie frente al cajero.

— ¿Me recuerdas? — le preguntó Donghyuck, complacido pero negándose a que se le notara en la cara.

Mark asintió con una sonrisa y jugó con el marcador que tenía en la mano, haciéndolo girar un par de veces antes de dejarlo en el mostrador.

— Me estabas contando todo sobre tu patronus y a qué casa pertenecías — Agachando la cabeza, Mark cogió el marcador y empezó a darle vueltas con los dedos de nuevo — Y yo también soy fan de Harry Potter, así que me impresionaste bastante —

— ¿En qué casa estás? — Donghyuck no pudo evitar preguntar. Todos los pensamientos de redimirse volaron de su cabeza. Aunque no parecía haber necesidad de redimirse por más tiempo viendo que Mark también era un Potterhead.

Sacando la lengua para lamerse el labio inferior, Mark contestó:

— Gryffindor — en el mismo momento en que Donghyuck llegó a esa conclusión por su cuenta.

Con una sonrisa de oreja a oreja, Donghyuck dijo:

— Pareces un Gryffindor —

No era un elogio, ni mucho menos, pero Mark tenía una enorme sonrisa en la cara que le decía a Donghyuck que estaba feliz por parecer que pertenecía a Gryffindor. Donghyuck no quería decirle a Mark que Slytherin era la mejor casa.

— ¿Otra vez el Butterbeer, entonces? — preguntó Mark con una risa, ya tomando una taza Venti.

¿No? quiso decir Donghyuck, sin tratar de entender por qué su subconsciente sonaba inseguro.

— Sí, claro — respondió con una carcajada. Conseguir un Butterbeer Frappuccino tamaño Venti era mejor que discutir sobre la mejor casa en cualquier caso — También un té Chai y un Mocha Frappuccino con crema batida extra del mismo tamaño — que se jodan Renjun y su chocolate helado — Y extra de menta para el Mocha Frappuccino — que se joda Renjun.