Romance trágico.

Pérdida

Abrumada por la pérdida de su familia, sentía que el corazón se le rompía en mil pedazos, a pocos días de su graduación, cuando sus padres viajaban para el tan esperado día, el teléfono sonó y al responder solo se quedó en silencio. Le informaron que su familia se había visto envuelta en un accidente y lamentablemente no habían sobrevivo. El mundo se le vino encima y ya no hubo como levantarse...

Al pasar los días, luego de su graduación tan amarga, las cosas desafortunadamente empeoraron, era una graduada en medicina que actualmente no tenía empleo y sin el apoyo de sus padres no podía seguir viviendo en su actual ciudad. Tomo la decisión de volver al pueblo donde vivían sus padres, para así tener un techo donde permanecer por el momento.

La invadía la tristeza porque tener que volver en esas circunstancias a despedirse de sus padres era lo peor que le podía haber pasado.

Hace siete años que no visitaba el pueblo y las circunstancias no eran las mejores...

Antes de ir a estudiar su vida era tranquila, tenía una familia amorosa, amigos cercanos y como cualquier adolescente tenía una relación con uno de sus amigos del barrio. Durante la secundaria, se puso de novia con Eren pero su relación llego a su fin cuando se fueron a estudiar a lugares diferentes, siguieron siendo buenos amigos después de todo se conocían desde niños. Luego él conoció a una chica llamada Historia la cual le encantaba ya que le parecía irónico su nombre al el estar estudiando para ser profesor de la materia Historia justamente. Se hablaban de vez en cuando con Mikasa y ella estaba feliz de que encontrara a alguien especial. Por otro lado ella prefirió ser más aplicada con sus estudios y no dedicarse a tener algún tipo de relación. Se había ido con su amiga Sasha a la misma universidad, ambas estudiaron medicina solo que Sasha se decidió por ser nutricionista y ella médica general. Salían y se divertían pero nunca nada serio, como cualquier chica sucumbía ante sus deseos y los placeres de la carne pero prefería estar sola, en algún momento llegaría alguien a quien entregarle su corazón.

Durante sus siete años de carrera siempre tuvo el apoyo de todos los que la rodeaban incluidos sus padres, pero nunca imagino que ese accidente le quitaría todo.

El viaje le había parecido interminable. Una vez que llego a su casa se quedó en silencio observando desde afuera, entró y se dirigió a su antigua habitación. Una vez que se instaló, miraba las fotos que tenía colgadas en la pared, sus padres habían mantenido todo exactamente igual durante todos esos años. Se rió con lágrimas en los ojos al verse en una fotografía con sus padres en la playa. Llevaba una malla color rosa, su papa estaba enterrado en la arena y  su mama se reía de sus travesuras. También se encontró con fotos de Eren, de Sasha y de sus otros amigos. Sonreía al ver a Armin, Jean y Connie llenos de tierra y moretones por jugar fútbol y  en otra  se veía estando todos juntos abrazados, si mal no recordaba era la última  foto que se habían tomado antes de partir cada uno a su nuevo destino. Siguió recorriendo su habitación y decidió ir a la de sus padres. Se acercó, la puerta se encontraba abierta, entro y se desplomo de rodillas junto a la cama, ya no pudo seguir conteniendo las lágrimas y lloro en silencio apoyando la cabeza en la cama. Era tanto el dolor que sentía que respiraba con dificultad, llevo sus manos a su pecho y comenzó a respira hondo para poder calmarse. Lloro hasta que ya no tenía lágrimas y el cuerpo se le había entumido por pasar tanto tiempo en la misma posición, se levantó de suelo, limpió su rostro con una de sus mangas, camino hasta la entrada y sin mirar cerró la puerta.