Margaritas en tus ojos •{Larry}•

TWO

Maldito dolor de cabeza, maldito el que me dejó hacer mi estúpida fiesta de cumpleaños pensaba el ojiazul mientras despertaba en el suelo de la sala de su casa

"Ugh" se quejó mientras se paraba, encontró a varias personas dormidas en el suelo como él mientras él caminaba hacia el baño, hizo sus necesidades una vez que estaba allí.

Quiso ir a su cama, pero pensó en las personas que seguramente estarían ahí, así que decidió regresar a donde despertó. Cuando estaba apunto de acostarse de nuevo en el suelo, vio sus flores favoritas en el piso, las tomó y sonrió melancólico en recuerdo a su novio, sabía que este asistiría, Harry nunca le falla.

¿Dónde estará el rizado?

¿Por qué no se quedó con él?

¿Por qué no recordaba nada de lo que sucedió anoche?

¿Habrá dicho algo que no debía?

Las preguntas lo empezaron a atormentar, decidió ir en busca de su novio para verificar que todo estaba bien, sentía que algo estaba olvidando.

Puso las flores en agua, tomó sus llaves, ni siquiera se molestó en cambiarse de ropa y salió de su casa.

Se dirigió a la florería donde seguramente estaba su novio como de costumbre, observó que estaba abierta cuando llegó, suspiró de alivió y entró.

Vio a Martha que estaba acomodando unas flores, "hola Louis, ¿Cómo estás cariño? feliz cumpleaños" saludó amablemente la señora

"Hola Martha, muchas gracias, estoy muy bien ¿Qué tal tu navidad?" contestó el castaño mientras buscaba girasoles para Harry

"Oh maravillosa, ¿Qué tal la tuya?, ¿te divertiste en tu cumpleaños?"

"Sinceramente" rio "no recuerdo nada"

"Oh, me imagino que te la pasaste increíble"

Asintió un tanto confundido, se dirigió a la caja para pagar las flores,

"Eres un inútil"

"Ya no te amo Harry"

Le empezaron a llegar recuerdos mientras Martha le hablaba, sacudió la cabeza queriendo olvidar eso, pero le empezaron a llegar más

"Eres un marica"

"Ya estoy harto de tus ñoñerías"

"Louis, ¿estás bien?" pregunta la señora cuando ve al castaño perdido en sus pensamientos

El castaño asintió un poco confundido "estoy bien Martha, iré a ver a Harry, disfruta de tu día" se despidió de la señora con un movimiento de mano y se dirigió para la casa del rizado.

Le llamó unas cuantas veces a Harry, pero este nunca atendió, cuando llegó a su casa, nadie le abrió la puerta, vio que no estaba el auto de sus padres así que pensó que tal vez habrían salido con los abuelos como de costumbre cuando es navidad.

Decidió regresar a su casa, cuando entró vio que todo estaba limpio y la gente ya se habían ido, vaya, que amables personas pensó el ojiazul, decidió tomar un baño y dormir un rato en la espera del mensaje de Harry

El cual nunca llegaría

"Harry, creo que ya es hora de despertar amor" dijo Anne mientras entraba a la habitación de su hijo "ya es muy tarde cariño, ¿no querías ir a ver a Louis para entregarle su regalo de navidad?"

El rizado empezó a llorar en cuanto lo nombró, Anne asustada lo tomó en brazos, no sabía lo que estaba pasando, no sabía por qué motivo su bebé había llegado a la casa llorando diciendo que era un inútil por creer en el amor.