Él sabia que me dolió
pero simplemente lo ignoro.
Ya no me sale eso de ser feliz,
hay un momento en el que tienes que aprender a ser tu mejor amiga.
Quiero ser como esas chicas que no se ilusionan con cualquier tontería, ahora solo me invaden los recuerdos.
Así funciona mi mente: Empiezo el día feliz y lleno de alegría, hasta que un simple recuerdo hace que me entren ganas de morir. Que desesperación. No quiero volver a querer a nadie, desde que te fuiste no ha pasado nada, solo tiempo y ahora que no estás, ¿Que será de mi felicidad? Mejor me callo, ¿no? Entre mas callada esté, más estaré sufriendo.
A veces es más fácil darle las espalda a los problemas que solucionarlos, y no, no es de cobardes, solo que a veces no puedes más. Perdí la cuenta de las veces que creí que todo sería diferente; y no fué así.