El secreto de los Tigres

CAPITULO 1: OJOS INTIMIDANTES

Era de nuevo mi primer día de escuela, ya era mi ultimo año en la preparatoria y luego tendría que irme a la universidad, probablemente lejos de este pueblo. Ese era un tema que me entusiasmaba pero que al mismo tiempo me aterraba mucho porque quería estudiar algo que me hiciera feliz, pero al mismo tiempo no quería alejarme de mi familia, bueno, mas bien de mi madre, que era la única a la que tenia cerca de mi. Mi padre estaba muy lejos de nosotras y lo veía de vez en cuando y no tenia hermanos, solo éramos mi mamá y yo.

Sali de mi casa temprano y me dirigí caminando hacia mi escuela, con mis audífonos puesto escuchaba a una de mis bandas favoritas. Me encanta caminar a solas para ir al colegio, me hace reflexionar y pensar en como va a ser mi día o como puedo mejorara algunas cosas que hice mal en días anteriores.

Estoy a pocos pasos de llegar a la preparatoria, así que ya hay varios jóvenes hablando al rededor del establecimiento. Me muevo conforme el ritmo de la música que esta sonando a través de mis audífonos y estoy cerca de llegar a la entrada del lugar, cuando siento que una presencia viene por detrás de mi, así que me trato de voltear, pero antes de que logre ver quien viene detrás de mi, siento un gran impacto de un cuerpo  que me empuja y casi caemos juntos, pero logro detener nuestra caída.

Las risas de alguien que conozco tan bien suenan contra mis hombros mientras siento como es que sus brazos me abrazan fuertemente, así que le devuelvo el abrazo.

Perla, mi mejor amiga desde que estudio en la secundaria, se separa un poco de mi y se rie un poco mas leve.

—¡Hey! — me dice mientras se separa de mi, le devuelvo la sonrisa.

—Que tal, ¿Qué tal te fue en tu viaje?— le pregunto, ya que hace unas cuantas semanas se fue de viaje a otro país, creo que a España y me pregunto si quería ir, pero era un viaje familiar asi que no podría ir en ese tipo de cosas, así que decidí quedarme.

—Super bien.... pero hubiera sido mejor si tu hubieras venido. Aun no entiendo por que no quisiste ir.

—Ya te lo dije, eso era un tiempo para que compartieras con tu familia... conmigo compartes todo el tiempo— le doy una sonrisa de boca cerrada y caminamos juntas dentro de la escuela.

Nos dirigimos hacia la librería del colegio y le pedimos a la señora que atiende en ese lugar que nos de una copia de los horarios de nuestros grados para poder saber qué clases nos tocan en el primer periodo. Perla hace puchero al darse cuenta que no compartimos ninguna de las clases de este día, hago una mueca de disgusto y suspiro. Caminamos por el pasillo para dirigirnos a nuestra primera clase, cuando ya estamos en la entrada de la clase que le toca a Perla, nos quedamos un rato ahí esperando a que sea la hora de entrar a clases.

—Odio que estemos en clases distintas, cuando todavía estábamos en secundaria siempre estábamos juntas ¿Por que no puede ser igual ahora?— se queja y le doy una sonrisa divertida, siempre se la pasa quejándose de todo, sobre todo de que no estemos juntas en clases.

—Sabes que nos separaron porque elegimos carreras diferentes, tu magisterio y yo medicina— le explico. Perla hace una de sus típicas muecas, que siempre hace cuando algo no le parece o no esta de acuerdo con eso.

—No tengo ni puta idea de como voy a sobrevivir sin ti ayudándome en matemáticas o física, tu siempre eres mi salvación— me hace un gesto de que la ayude y yo me rio.

Perla nunca ha sido buena en matemáticas o física, cualquier cosa que tenga que ver con números es un infierno para ella, y yo siempre en años anteriores le he ayudado mucho para que pueda pasar el curso, a cambio ella me da copia de algunos cursos que me cuestan como química o literatura.