Pretty Boy |Spencer Reid|

In the end

Inspirado en el 01x09.

Cerré mi teléfono luego de colgar esa llamada con Jason. Sabía que tenía mucho trabajo, pero aún así, me comuniqué con él debido a que me lo había pedido antes de dejar Quántico. Una novata entrevistando a un mentiroso experto era una gran responsabilidad, todos sabían eso.

Solté un suspiro y recargué mi cabeza en la ventana, fijé la mirada en el paisaje pero de inmediato aparté la vista del camino. 

Apreté los ojos. La velocidad del tren y el olor me provocó mareos. 

Dirigí la vista hacia los pasajeros que me acompañaban en el camino hacia Texas. Pocos pasajeros, no llamaron mi atención y sinceramente, no estaba en humor para perfilar a alguien.

Posiblemente más tarde. Otro mareo llegó a mi y sentí cómo el desayuno comenzaba a subir por mi garganta queriendo regresar al exterior. 

No ahora.

Apreté el puente de mi nariz tratando de evitarlo, hacía días que no me sentía así. El estrés de mi trabajo y el insomnio provocaban los vómitos y mareos. 

Traté de relajarme, una entrevista sin supervisión de Aaron o Gideon significaría un gran avance para mi trabajo y la confianza que habían puesto en mi. 

Abrí de nuevo el expediente donde tenía toda la información del sujeto al que debía entrevistar. 

Un asesino de niños.

Mi teléfono vibro una vez más en mis manos y sonreí al verlo. 

-Hey- saludé con una sonrisa, aunque era consciente de que él no la veía

-¿Cómo está el viaje?- pregunto

-Largo- sonreí

-Bueno... considerando que un viaje en tren desde Virginia hasta Texas tiene una duración exacta de diecinueve horas tu deberías haber...

-Spence- lo corté riendo- estoy bien- aseguré

Hablar con el de verdad me pone de buen humor. Otro mareo se hizo presente y volví a recargar la cabeza en el asiento soltando un quejido.

-No te escuchas bien...- continuó hablando

El tren paró de repente, observé hacia la ventana... aún no habíamos llegado. Tragué esperando que el desayuno volviera a mi estómago.

-Sucedió algo, debo irme- interrumpí su discurso una vez más y sin esperar respuesta colgué.

Un guardia de seguridad entró a la cabina y pidió calma mientras caminaba a través del pasillo

-¿Está todo bien?- pregunté

El me miró  dudando y luego observó mi expediente que descansaba en mis piernas

-¿Es un agente?- se agachó a quedar a mi altura

-FBI- respondí 

-Un suicidio- suspiró- pero tenemos un protocolo que seguir- se puso de pie y siguió pidiendo calma hacia los demás pasajeros

En un movimiento rápido un hombre que se encontraba a tres filas de la mía se puso de pie y tomó el arma del oficial disparándole dos veces en el estómago. 

Inmediatamente me puse de pie y un mareo volvió a hacerse presente. Me sujete del asiento buscando estabilidad cuando el hombre ya estaba frente a mi chocando su mano en mi mejilla haciéndome caer sobre los asientos.

Mierda.

-¡Que nadie se mueva!- gritó tomando mi arma y apuntando a todos los pasajeros que se habían puesto de pie cuando el hombre disparó al oficial.