CAPITULO UNICO

246 19 22
                                    


El canadiense se sentía mal su novio llevaba una semana ignorando lo como si el no existiera, cada vez que llegaba el alemán de trabajar este intentaba abrazarlo o darle el clásico beso de bienvenida siendo apartado de golpe por el germano.

Ya casi era 14 de Febrero y el pequeño canadiense estaba parado enfrente de una vitrina fuera de una tienda de aquella plaza comercial, un lindo libro que el alemán estaba buscando y lastimosamente no había podido encontrar, más decidido que antes y compro el libro ya mañana se lo daría al de cabellos azabache.

Llegó y comenzo a preparar la comida mandándole un mensaje al contrario notando el visto, de que terminó sirvió la comida para ambos esperando hasta que la comida se enfrió y comió un poco para lavar los platos y guardarlos.

Ya en la noche le volvió a mandar mensaje siendo ignorado en totalidad, mañana sería 14 de febrero y al parecer... El alemán había encontrado alguien con quién la pasaría mejor.

Cansado de esperar su respuesta se acostó y cubrió con las sábanas llorando hasta que se quedó dormido, al día siguiente se levantó y miro que lo había citado en un lugar algo alejado.

Se arregló y tomo el regalo que le había comprado llegando a aquel lugar notando que era un hotel algo caro ya que contaba con 5 estrellas y todas las comodidades.

Entro a la recepción llegando a el lobby esperando al alemán viéndolo entrar con otro country al parecer.... Solo era para burlarse en su cara.

Se acercó a él y sin decirle nada se paró enfrente de el y le extendió el libro bajando la mirada.

Espero te guste lo encontré ayer me tengo que ir

Esas palabras le dolieron decirlas pero al ver qué solo lo tomo e hizo señas ignoro todo y salió de aquel lugar.

Una vez en la puerta del hotel sintió un pañuelo en su nariz y boca desmayando lo al instante puesto que tenía cloroformo, pasaron horas y empezó a despertar por un olor a rosas y velas aromáticas.

Hum... — se remueve en la cama sintiendo las sábanas suaves abriendo sus ojos de golpe y viendo al germano delante de el.

Sintió los cálidos labios del alemán besando los de el y sin poder evitarlo paso sus brazos por su cuello y soltando lágrimas, al separarse el alemán sonrió y limpio sus lágrimas con sumo cuidado.

Perdoname bebé, perdoname por ignorarte pero espero que la sorpresa que me plante te guste — el de cabellos azabache no mentía.

Solo cállate y bésame y hazme el amor — esa fue la señal para el alemán.

Con cuidado quitó la ropa del canadiense mientras besaba su cuello con cariño dejando chupetones y mordidas en cada parte de su piel.

El pelirrojo se estremecía al sentir como los dientes del alemán mordían su pecho y succionaba uno de sus pezones como queriendo sacar algo.

Sintió las manos frías del contrario recorrer su cuerpo y bajar a su entrepierna comenzando a masajear escuchado los suspiros y gemidos de placer que el más pequeño en estatura daba.

Masajeo su miembro con cariño bajando besando su vientre dejando moretones y chupetones por dónde su boca pasaba, comenzó a mover su mano y bajo lamiendo su entrada con cariño.

El canadiense estaba hirviendo en calor el germano le estaba haciendo el amor como no pensaba que pudiera hacerlo, tomo el cabello del mayor en altura y lo acaricio con cariño, una vez que su entrada estaba completamente húmeda acostó al alemán dándose cuenta que solo llevaba sus boxers puestos.

Mordió su labio y bajo estos notando la gran erección que esté portaba, la metió a su boca así embargo por su tamaño exuberante no le entro toda, lo que quedaba afuera con sus manos masajeaba haciendo círculos moviendo su cabeza de arriba abajo escuchando los jadeos y suspiros del alemán.

El de cabellos azabache tomo del mentón al pelirrojo para comenzar a besar sus labios con cariño.

El alemán recostó al canadiense en la cama cubierta de pétalos acariciando la entrada del menor con cariño intosduciendo dos dedos con cariño.

Movió estos y cuando sintió que estaba listo se introdujo con cariño y sin lastimarlo, cuando el pelirrojo le dio indicación de que se pudiera mover comenzó a mover su cadera de arriba a bajo.

Sintió al azabache contraerse moviendo más su cadera si tiendo aquel bulto en su abdomen.

Movió más rápido su cadera sintiendo como cada cada vez se introducía más en el, gimiendo de placer y de gusto se corrió en su pecho sintiendo las dulces embestidas del alemán.

El contrario sin poder evitarlo se corrió bastante abultando el miembro del mayor en edad dejando su vientre abultado.

El canadiense acaricio su vientre apretándolo dejando sacar la esencia del mayor.

Atrajo al alemán besando con cariño sus labios.

Te amo Canadá —susurra el alemán siendo abrazado por el menor.

Yo también te amo mi Alemania — y así quedó su plática con mimos y amor después de tener una noche de pasión

Después de varios mal entendidos se dio cuenta que todo estaba bien.

✨♥️✨♥️✨ FIN? ✨♥️✨♥️✨

UN MALENTENDIDO CON FINAL FELIZ ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora