Emperador Demonio y Rey Demonio

13.- Capitulo 12

"¡ Lancer, mátate!" -enlace mental.

"¡Lancer murió!" - habla.

¡No eres humano! -pensamiento.

Afuera de la ciudad. En el aire sobre el bosque.

Tokiomi miró al monstruo debajo de él con una expresión horrorizada, esto se estaba saliendo de control. Esta cosa estaba poniendo en peligro el secreto de esta guerra. No puede permitir que la gente común vea esto. Su viejo amigo Risei era un hombre convincente pero incluso él tenía sus límites. Lo último que necesitaba el jefe de la familia Tohsaka era la Torre del Reloj o la Iglesia para interferir en la Guerra del Grial. Se volvió hacia su sirviente y se inclinó una vez más.

"Su Alteza-"

"Te escuché, Tokiomi. No soy sordo. No es necesario que lo repitas." Gilgamesh dijo con un tono molesto antes de mirar al monstruo. "Esta abominación es dolorosa de mirar. Muy bien, debería prestarte tres armas de mi tesoro para matar a la bestia. Sé agradecido".

Gilgamesh no le prestó atención a Tokiomi mientras se concentraba en el monstruo de Caster. Habiendo activado su Puerta de Babilonia, aparecieron tres portales de oro bajo Vimana. Todos ellos apuntaron al monstruo en el suelo. Al segundo siguiente, se dispararon tres armas como proyectiles, todas volando hacia su objetivo. Sin embargo, no lograron matar a la abominación y, en cambio, solo cortaron algunos de sus tentáculos más grandes. La monstruosidad rugió cuando sus heridas se curaron con una velocidad increíble. Archer dejó escapar un gemido de frustración.

"Qué lástima perder tres de mis tesoros en algo como esto". Tokiomi parecía confundido.

"¿Su alteza? ¿No va a continuar?" Gilgamesh enarcó una ceja.

"¿Por qué debería? Ya desperdicié mis tesoros en este monstruo. Deja que otros sirvientes se ocupen de eso, no tengo ningún deseo de mancharme con esta cosa." ahora su amo parecía estupefacto.

"Pero pero-!"

"¿Tienes algo que decir, Tokiomi?" Los ojos rojos de Gilgamesh miraron a su maestro. "¿Quieres estar en desacuerdo con mi decisión?" su amo se congeló antes de agachar la cabeza.

"No, mi rey."

Gilgamesh chasqueó con la lengua, decepcionado de que su maestro actual no tuviera agallas. Incluso ese chico que era el maestro de Rider tenía más agallas para hablar en contra del Rey de los Conquistadores. Sin embargo, sus ojos pronto encontraron a alguien más interesante. Archer sonrió. Quizás su maestro todavía pueda brindarle entretenimiento.

"Tokiomi, si quieres demostrar tu valía ante mis ojos, no me importará matar a esta bestia por ti. Pero primero, tendrías que hacer algo en esta guerra."

El jefe de la familia Tohsaka no dijo nada, pero pronto decidió hacer lo que Archer quisiera. Su condición de segundo propietario de Fuyuki y la posibilidad de ganar esta guerra estaban en juego. Gilgamesh sonrió antes de darle la vuelta a Vimana.

Hacia otros dos maestros.

El monstruo convocado por Caster era una abominación de tentáculo gigante. Era más alto que cualquier árbol y podría haber sido visto fuera del bosque. Dejó escapar un aura extraña similar a una especie de gas púrpura que cubría el área a su alrededor. El Sirviente loco estaba dentro de él, escondido a salvo mientras su bestia lidiaría con cualquier amenaza para su creador. Avenger examinó cuidadosamente a la criatura. Era enorme y tenía demasiados apéndices, su katana sola no lo cortaría. Lo que es peor, no podía ver ninguna divinidad en él, lo que hacía que su noble fantasma fuera menos efectivo contra el monstruo.