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Johnny recibio la invitación de Ten para una pijamada en su casa. La cual acepto sin siquiera cuestinarselo, porque era Tennie, y no podía negarle nada aún si quisiera.

Johnny no sabía de que iba la pijamada, lo único que la chica le dijo era que quería probar algunas cosas que Taeyong le regaló.

La verdad, a Johnny no le interesaba en absoluto, solo quería ver la brillante sonrisita de su pequeña, verla feliz era lo único que le daba vitalidad. La primara vez que la vio, pensó que era un ángel, aún lo sigue creyendo, no podía creer que alguien tan hermosa pudiese existir.
Sabía que era tonto, pero la chica era todo por lo que el siempre había rezado.

Tennie era irreal, cada que la veía se sentía tan en las nubes que pensó que su aroma a rosas era algún tipo de droga.

Aún recuerda el día en que la conoció.

Su cabello castaño largo hasta sus cadera, brillando en ese día caluroso. Sus ojos azules, como dos cristales, adornado con pestañas tal mariposas. Sintió derretirse cuando lo miró, curvando sus labios dulces en un sonrisa cálida. Pero Johnny sabía que era malo, Joder, era demasiada tentación.

Pues su hermosa doncella de ensueño, era la novia de su mejor amigo, Yukhei.

Johnny podría jurar que hizo todo lo que estaba en sus manos para no caer por ella, para no querer acariciar su cabello cada que estaba triste, para no atender a sus pucheros caprichosos, para no fijarse en sus labios mientras le hablaba, para no alagar cada cambio en su imagen, por mínimo que sea.
Pero esto era más fuerte que él, lo supo cuando soñó con ella, cuando la soñó desnuda bajó suyo, rogándole por sus caricias. Johnny se sentía de lo peor.

Ten era linda e inocente, además de ser la novia de su mejor amigo, se sentía sucio por pensar en ella de esa manera, aunque muy profundo en su ser, era lo que su subconsciente le pedía.

Johnny ya no sabía que hacer, se sentía desesperado, cada que veía a la chica solo tenía ganas de tomar sus labios entre los suyos, incluso cuando Yukhei estaba presente.

Hoy le diría todo lo que sentía, lo llevaba pensando desde meses, porque realmente no quería perder a su linda estrella de su vida, pero no podía retenerlo más, su corazón dolía cada que veía a Tennie entre los brazos de Lucas.

Si la chica lo rechazaba, no podía hacer más que quedarse como su amigo, aunque la quisiera tanto como a su vida, no podía obligarla a amarlo, no quería apagar el brillo en sus ojos inocentes.

...

Johnny estaba frente a la puerta de Ten, estaba ahí parado debatiendo si tocar la puerta o irse y esconderse en su habitación. Se sentía muy decidido hace unos minutos, pero ahora allí, tenia ganas de correr.

Escuchó la puerta abrirse de repente, y sintió que su alma casi se iba de su cuerpo. Bueno, parecía que el destino había decidió por él.

"Hola ตัว เอง [dtua-eeng], gracia por venir, eres el mejor, pasa" Ambos pasaron en un ambiente extrañamente cómodo para Johnny, que estaba a flor de piel de los nervios, y el apodo cariñoso que Ten uso con él, realmente no lo ayudaba.

Johnny no sabía lo que significaba, nunca lo supo, ni siquiera sabía cómo se escribía como para buscarlo en algún traductor, pero cuando salía de los labios de Tennie, sonaba tna malditamente bonito, y le sorprendió de que sólo lo use con él. Intentó preguntarle un par de veces por el significado, pero ella solo se sonrojaba y le decía que significaba algo lindo, él solo le creía, Ten no era capaz de mentirle.

La casa de Ten era linda, acogedora, el ambiente natural de su dueña. Los detalles de decoración le encantaban, pero sentía que en esa gran casa, su niña debía sentirse sola, Lucas trabajaba y estudiaba diariamente, con algunos descansos en los fines de semana, él chico estaba algo necesitado de dinero desde que sus padres lo echaron de su hogar por su adicción al alcohol.

🍭𝕾𝖑𝖚𝖒𝖇𝖊𝖗 𝕻𝖆𝖗𝖙𝖞 🍭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora