Una colección de one shots protagonizados por Chase y Marshall como pareja principal.
Este libro simulara varias situaciones y como reaccionarian los dos cachorros.
Chase es un romántico, todos saben que puede llegar a ser atrevido con el dalmata. Tan solo en aquella mision, donde el dally se disfrazó de oveja al pastor alemán se le ocurrió decirle:
— ¿Quieres ver como este perro pastorea el ganado? — Le dice coqueto.
Esas simples palabras hicieron que su cara ardiera de lo avergonzado que se sintió. Aunque no siempre es así de descarado, otras veces es mas sutil con sus indirectas. Cosa que el dalmata jamas entiende.
— Marshall, quisiera tenerte siempre a mi lado...
— Eso es tan lindo Chasy — Dice agitando la cola felizmente.
— O encima
— ¿Como? — Chase le susurra en su oreja — Oh... — Ahora su cola no se agita.
Pero no siempre es así, la mayoría del tiempo es alguien bastante cursi.
— Sabes cariño, estas en mi cabeza todo el día — Marshall le mira atento — 16 horas te pienso y las otras 8 sueño contigo
El dalmata siempre disfruta de las cosas lindas que dice Chase, muchos dirían que con el tiempo podría ser molesto, pero para el dalmata jamás lo a sido. Por mas tonto o meloso que sea su pareja, su corazón salta de emoción con sus palabras lindas o sus tiernos gestos de amor.
— Chase... ¿Que haces? — El mencionado daba vueltas alrededor de el — ¿Has estado bebiendo de nuevo?
— No — Finalmente se detiene con intensiones de dirijirse donde se encuentra Zuma — Aposte con Zuma que daria tres vueltas al mundo y eso hice — Le sonríe — Le di tres vueltas a "Mi mundo"
La sonrisa enternecida del dalmata decía todo, pero también el pastor aleman a veces llega a ponerse nervioso. Como aquella vez que Marshall porto su uniforme de policia para una misión especial.
— ¿Como me veo? — El sonreía emocionado, se poso para que lo vierq bien — ¿Chase...?
El se quedo ahí sin decir una sola palabra, hasta que Marshall reventó su burbuja.
— Q-Que — Escucho como repitio su pregunta — Uhm Te... Te ves mu-muy bien cariño — Podía verse su cara llena de rubor — Y-Yo ugh ¡Me lla-llama Ry-Ryder!...
Marshall lo vió correr a quien sabe donde. El joven humano se acerco hasta el dalmata que aun seguía sentado.
— ¿A donde fue Chase? — Ryder dijo.
¿Puedes culparlo? Marshall sin querer puede llegar a provocar a Chase, decir algo que lo hace tartamudear. Ponerle nervioso sin razon aparente. Es el único en el mundo que logra que él se sonroje.
— ¿Estas cómodo? — Pregunto a su pareja que acaba de tumbarse a su lado.
— Claro Cha...
— ¡Oye! — El mencionado lo interrumpió y quito su oso de peluche debajo de Marshall quien lo había aplastado sin querer — Ten mas cuidado...
— Oh lo siento — Río avergonzado — No lo habia visto
— Esta bien fue un accidente — Después de decir esto último coloco su oso a un lado, puesto sobre una almohada para que estuviera mas comodo, finalmente beso la cabeza del dalmata.
— Jeje — Marshall recargo su cabeza sobre Chase — Cuidas mucho a ese oso... Es como tu hijo — El de pelaje café escucho atento — Seguro serás un buen padre
— ¿Que tratas de decir? — Chase se puso pálido — ¿Acaso estas esperando un bebe?
— ¿Que? — Marshall río — No claro que no cariño
— Menos mal — Suspiro.
— ¿No quieres tener hijos? — Vió a Chase negar con la cabeza.
— Somos muy jovenes para criar a un niño — Abrazo su pareja — Aunque en un futuro, si es que aún sigues amando a este pastor... Podríamos tener una familia
— Te amaré siempre Chase — El dally correspondió el abrazo, quién sonrió ante lo dicho por este — Me gustaría formar una familia contigo, tener un bebe y así jeje
— Seria lindo — Un pensamiento cruzo la cabeza de Chase — ¿Y si hacemos uno?
— ¿Que?
— ¿Que?
Chase también es sobreprotector y eso es entendible. Cuando te das cuenta que Marshall es un iman de tropiezos y accidentes tiendes a sentir preocupación por él. Siendo su pareja esta muy consciente de este echo, hay veces que no deja de estar cuidando al Dally, por el temor de que algo le malo le vaya a pasar.
Hubo un día que no lo dejo salir de su casa de cachorros, porque tenía el presentimiento de que se iba a lastimar.
— Lo siento en los huesos — Fué lo que dijo.
Chase también es celoso, por no llegar a llamarle posesivo. Entiende que Marshall le ame demasiado, pero eso no quita el echo de que traten de coquetear con él, cuando se trata de sus amigos no hay problema, pero cuando es un desconocido el siente que debe demostrar su dominio. Cuando caminan juntos y algun can los ve siempre se hace notar y hace notar que son compañeros. Una vez le gruño a un cachorro que le iba a preguntar la hora a su dalmata.
— ¡Eso es, corre como un cobarde! — Chase se sienta y nota como le mira su pareja — ¿Que?
— ¿Era necesario intimidarlo? — Se encogió de hombros el pastor alemán — ¡Solo me pedía una dirección!
— No me pareció eso... — Refunfuño.
— A veces eres increíble Chase...
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