Capítulo 3

3K 272 92
                                    

Winwin tenía que admitir que la comida olía bien. Su boca babeo mientras el olor a salchichas y huevos llenaba la cocina. No había comido desde el desayuno la mañana anterior, y tenía un nudo en el estómago del hambre.

Cuando vio la cabaña rústica Winwin no estaba seguro de qué esperar, pero el interior era absolutamente hermoso. La cocina estaba pintada en amarillos y cremas, y los electrodomésticos eran modernos. Winwin seguía observando la ordenada cocina preguntándose si Yuta tendría algo de crema de avellana.

Como si leyera su mente, Yuta le hizo una taza y se la entregó. —La crema está en la nevera.

La nevera era negra de lado alado, y cuando Winwin la abrió, sonrió. Tartas y pasteles, strudels y donas llenaban los estantes. —Me parece que te gustan los dulces.

—Soy un oso, cariño. —La mirada de Yuta recorrió a Winwin. —Me encanta comer algo dulce.

Winwin se sonrojó mientras buscaba la crema. Para su deleite, Yuta almacenaba sabores variados. Cogió el pequeño envase de avellana y se sirvió una cucharada en su taza. —El desayuno huele bien.

—Me alegra que lo creas, —dijo Yuta . —Una cosa que mi mamá insistió que sus chicos supieran es cómo caminar alrededor de una cocina.

Winwin cerró la nevera y se sentó a la mesa. —¿Vive por aquí?

El dolor en la cara de Yuta hizo que Winwin se arrepienta de preguntar. Se paró ante la estufa mientras le decía a Winwin que ella no sólo no estaba por aquí, sino que no estaba en ninguna parte.

—Lo siento.

Yuta sacudió la cabeza. —Fue hace mucho tiempo.

—A mí igual, —dijo Winwin, envolviendo sus manos alrededor de su taza.

—Mis padres murieron en un accidente de coche. Zuchen tenía veinte y yo tenía dieciséis años cuando sucedió. Mi hermano me crió durante los próximos dos años, luego me fui a la universidad. Yo estaba en mi primer año cuando tuve que volver a casa. Zuchen no es una persona muy responsable. Había perdido la casa de nuestros padres y terminó mudándose a un alquiler que no podía pagar, así que hizo que sus amigos se mudaran con él. Entonces no tuve más remedio que mudarme también.

Wow. Winwin no podía creer que había derramado su corazón a un completo desconocido. En verdad, hacerlo hacia que su pecho se sentía bien. Winwin había dejado que muchas cosas supuraran dentro de él, incluyendo un montón de resentimiento y odio hacia su hermano.

—¿Por qué tuviste que dejar la universidad?—Yuta poso el plato de Winwin delante de él, luego se sentó.

—Él se gastó todo el dinero de la póliza de seguro de vida de nuestros padres. No quedaba nada para pagar mi matrícula o los libros. —Entonces Zuchen se volvió malo, golpeo a Winwin y le echó la culpa de todo lo malo en la vida de Zuchen. Por otra parte, Zuchen siempre había sido malo con Winwin y no podía entender por qué. Pero el abuso no había comenzado hasta que Zuchen había sido atado con la responsabilidad de Winwin.

La única razón por la que Zuchen había aceptado ser el guardián de Winwin era porque el testamento lo había estipulado. Si Zuchen no hubiera accedido, no habría conseguido su parte del dinero.

Winwin rápidamente se secó las lágrimas caídas con sus palmas. Yuta probablemente pensaba que era un perdedor ahora, pero por alguna razón Winwin no podía callarse. Sentía como si las compuertas se hubieran abierto y todos sus secretos estuvieran derramándose. —Zuchen sacó su rabia contra mí, culpándome por su podrida vida, por sus desgracias, por perder su trabajo, y...— Winwin se mordió el labio inferior. —Él empezó a golpearme por ello.

Yuta (Yuwin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora