hetero » kunsung

vii.

⚔️ — DE CÓMO KUN AMÓ A JISUNG.

Jisung había tenido su última clase del día, así que se dirigió al departamento de Kun en cuanto terminó. Estaba feliz ya que no tenía nada que hacer.

En cuanto entró, se dirigió a la habitación, en donde no encontró a nadie. Supuso que Kun estaba en la ducha, debido al ruido del agua que escuchaba.

Intentó distraerse sacando sus cuadernos de su mochila, pero no podía quitar de su mente la imagen de su novio dándose una ducha, enjabonándose y mojándose con el agua que corría por su cuerpo.

Mordió su labio inferior, moviendo la cabeza. Desde su pequeño encuentro de la otra noche no habían vuelto a hacer nada de ese estilo. Jisung se sentó en la cama mientras recordaba.

Kun le había tocado tan bien. Sus  manos recorrían su cuerpo a la perfección.

Jisung se dejó caer de espaldas en la cama cuando recordó la suave mano de Kun tomar su pene. Alzó las caderas suavemente, soltando un jadeo.

Entonces se dio cuenta de una cosa.

Él no había visto el pene de Kun.

Lamió sus labios, estaba seguro de que sería grande, es decir, todo en Kun era gigante. Recordó haberlo visto aprisionado contra su ropa interior un par de veces. Ese bulto era gordo.

Jisung retiró su chaqueta cuando comenzó a aumentar la temperatura en su cuerpo, pero luego volvió a recostarse sobre su espalda.

Deslizó sus dedos suavemente sobre la tela de su camisa, soltando un pequeño ruido desde su garganta cuando rozó un pezón. Kun le había lamido ahí, y se había sentido tan bien.

Continuó tocándose con ambas manos suavemente, doblando las rodillas para apoyar las plantas de sus pies en la cama. Su polla palpitaba emocionada contra su pantalón, completamente erecta.

Cuando Kun salió del baño, Jisung no tuvo tiempo de avergonzarse, observándole con los ojos cristalizados y las mejillas sonrojadas.

—Hola, cariño. —le habló el mayor.

La vista de Park rápidamente se posó en él. Tenía el cabello húmedo, y por su cuello caían pequeñas gotas de agua; Jisung deseó poder retirarlas con su lengua. Observó sus pectorales, bajando la vista hacia sus abdominales luego. Sacó la lengua, de pronto sediento cuando la piel se vio interrumpida por una molesta toalla gris.

—¿Cómo te fue hoy? —volvió a hablar Kun, volteándose hacia el armario para buscar su ropa.

—Hyung...

El mayor observó al chico, alzando sus cejas para que hablara.

Jisung tomó asiento en la cama. La ropa le rozó el cuerpo cuando se movió y tuvo que morderse la lengua para evitar soltar un ruido vergonzoso.

—Quiero verle. —susurró bajito.

—¿Verme? Pero si ya estoy aquí, bebé, ¿me extrañaste hoy? —habló el mayor con confusión, volviendo a darle la espalda para tomar su ropa interior del mueble.

—¡No! ¡Kun! —habló frustrado el más bajo, golpeando sus muslos suavemente con sus puños.

El nombrado alzó una ceja, mientras caminaba hacia la cama.

—¿Quieres hablar de algo, cielo? —preguntó en un tono preocupado, tomando asiento junto a él. —Deja que me vista y hablamos, ¿sí, amor?

Jisung no pudo oír bien lo que decía, de pronto Kun estaba muy cerca y se sentía mareado con el olor de su cuerpo. Apoyó la punta de la lengua entre sus labios, bajando nuevamente la vista por el torso del mayor, viéndolo de cerca como nunca antes. Estaba loco por él.