La hija del Alpha | Paul Lahote

Prólogo

2:30 a.m. Casa de Sam Uley

Narra Sam:

Dormía plácidamente después de un no tan largo día, pues algo me decía que no me separara de Emily, quería estar con ella a cada rato, no dejaba que nadie se le acercara, aunque estaba dormido me mantenía alerta por cualquier cosa.

Escucho como Emily se levanta rápidamente de la cama para luego oír pasos apresurados, abro los ojos de golpe y me incorporo en la cama, veo como se mete rápidamente al baño, me levanto casi corriendo hasta llegar a ella.

Emily que....–ya no termine al ver que vomitaba, me empecé a preocupar porque llevaba días que ella se notaba rara, era de madrugada y no había algún doctor, por lo que no me quedo de otra y fui a la habitación para después tomar el teléfono–

Hola Sam....–dijeron del otro lado–

Carlisle....necesito que me hagas un favor..–dije serio, o eso intente ya que soné un poco desesperado–....Emily a estado rara últimamente y ahora está....enferma...–dije intentando sonar calmado aunque ra casi imposible, era Emily de la que estábamos hablando–

Me quedé esperando esperando respuesta de su parte, creí que era por nuestra enemistad natural pero escuche una voz risueña de una de las "chupasangre"  de su casa, pero no la oi bien.

Crees que puedas venir Sam?.–dijo doctor colmillitos a lo que yo me confundí al principio pero supuse que ra porque  el tiene sus cosas para revisar a Emily allá–

De acuerdo voy para allá.–dije cortando la llamada y me vestí rápidamente para luego ayudar a Emily–

Ya en mi camioneta comencé el camino a casa de los Cullen, que al ser de madrugada llegué un poco más rápido, Carlisle ya me esperaba en la entrada cuando llegamos, me baje rápido y ayude a Emily a bajar, saludé con un asentimiento a Carlisle para luego entrar, me guió hasta lo que era su consultorio para luego poner a Emily en la camilla.

Bien...vamos a ver qué tienes.–dijo empezando a checar por lo que me dijo Edward sus signos vitales, ya que no sabía que estaba haciendo pero el lector de mentes contesto mi pregunta interna, que chismoso–

Aveces es inevitable no contestar esas preguntas...–dijo Edward de nuevo leyendo mi mente, parece que ya ni la privacidad existe– Lo siento.–dijo con una pequeña sonrisa al leerme de nuevo–

Todo está en orden...–dijo Carlisle a lo que lo mire incrédulo, mi mujer no estaba bien– Hablo de que no es ninguna enfermedad..

Entonces?.–dije y empecé a preocuparme más, ¿y si era algo peor?, No quería ni imaginarlo–

Talvez....se que puede ser.–dijo con una sonrisa al igual que Edward, supuse que leyo su mente, yo frunci el ceño un poco confundido, ví como Carlisle prendía una máquina y saca algo como un gel–Emily necesito que levantes un poco tu camiseta..–dijo a lo que yo solté un gruñido pero Emily me miro suplicante a lo que no me puse negar, ella alzo su playera y Carlisle le aplicó ese gel, agarro una parte de la máquina y la paso sobre el gel–

Que estás...–iba a preguntar qué hacía pero me calle al ver que la máquina era para hacer ultrasonidos y oía como salían unos pequeños latidos–...ella está...

Si Sam....–dijo Carlisle con una sonrisa para después limpiar ese gel– Felicidades....

Las lágrimas de parte de Emily no tardaron en salir, y yo aunque quería aparentar ya que odiaba mostrarme así frente a los fríos, no pude evitar sonreir, me sorprendió ver a una vampira rubia junto a Edward con una sonrisa, según yo ella nos odia.

Un bebé...–dijo en susurro con una sonrisa en el rostro, Emily le sonrió con dulzura–

Esperaba un hijo o una hija, no me importaba que fuera, moría de la felicidad estaba esperando este momento, amaba la idea de una familia y por fin se cumplió.

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