Depresión

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20 de Agosto de 2019

Era una tarde lluviosa, de esas que te dan nostalgia por alguna razón. Se escuchaba de fondo a Ni-ki tocando el piano, mientras Sunoo preparaba chocolate caliente en la cocina para el frío.

Mientras servía la bebida sintió unos brazos rodear su cintura, sonrió de inmediato al sentir el tacto de su querido novio.

—Hace tanto frío, me alegra poder calentarme un poco a tu lado.—Susurró Ni-ki al oído del otro.

—Te amo mucho, sabes?

—Si, lo sé.—Dijo con un tono burlón mientras Sunoo se daba la vuelta para encararlo.

—Muy gracioso Nishimura, ahora agarra tu chocolate antes de que se enfríe.

—Antes dame un beso.

—Antes dime que me amas.

—Te amo demasiado, amor mío.

—Si, lo sé.—Responde mientras se inclina un poco para juntar sus labios lentamente.

Era un beso tierno, demostrando el amor que sentían el uno por el otro. Un beso de los que aunque sean cortos, se recuerdan para toda la vida.

Hoy era una tarde lluviosa, de esas que te dan nostalgia por alguna razón. Se escuchaba de fondo una comedia romántica en el televisor, mientras Sunoo preparaba chocolate caliente en la cocina para el frío.

Sólo. Se sentía sólo por no tener a alguien quién le diera afecto y calor en esta tarde tan fría. Sólo era él y su chocolate caliente, un poco más dulce de lo normal, porque lo dulce ayuda en los momentos tristes.

Recordaba esos momentos en donde disfrutaba de estas tardes, cuando Ni-ki estaba a su lado. Ni-ki... Recordaba sus abrazos, su voz, su amor.

Amor. Estos días había pensado mucho en esa palabra, porque realmente, ¿Qué es el amor? pensaba que sabía que era, pero en estos momentos se encontraba confundido.

Toda su vida le habían hablado del amor, de lo maravilloso y perfecto que es encontrarlo. Un amor verdadero dura para toda la vida, le decían. Pero, ¿Realmente es así? O porqué no está con Ni-ki en estos momentos.

Él había sentido el amor y ahora solo siente un vacío en el corazón. Un vacío muy feo que ha tratado de quitar pero no se va. O bueno, tal vez no se había esforzado tanto.

Sunoo tenía un mes encerrado en su casa, si necesitaba algo llamaba algún amigo para que se lo trajera. Aunque eso había dejarlo de hacer, ya que estos siempre aprovechaban para incitarlo a salir a tomar aire, a comer o cualquier cosa que Sunoo rechazaba de tan solo escucharlo.

Él no lo hacía con mala intención, sólo que realmente no quería hacer más nada, el dolor que sentía no era normal, era algo que no podía explicar con simples palabras.

—Yo sólo quiero llorar estando sólo.—Dijo a la nada mientras unas lágrimas silenciosas paseaban por su rostro.

Pasó una semana más y Sunoo ya estaba demasiado cansado de que todo le recordara a Ni-ki. Los cuadros, las sábanas, las flores ya marchitas al lado de la puerta que aún no había querido botar porque esas son las últimas que el menor le había regalado... En fin, muchas cosas de las que ya era hora de desacer.

Fue un poco difícil, pero Kim logró recoger y guardar todo en cajas. Algunas se las daría al propio Ni-ki y otras las donaría, no quería desperdiciar nada.

Había sido mucho por procesar, fueron horas llenas de recuerdos y llantos que aunque intentó no pudo controlar. Fue tan duro que Sunoo sintió mucha paz al acabar.

Lo intentó, pero de igual forma no pudo detenerse al guardar algunas cosas en una caja más pequeña. Ahí guardó en pocas palabras los momentos más preciosos y especiales de su relación. Él solo quería tener algo físico que le recordara su más lindo amor.

Aunque fue duro y triste, él había aceptado que no quería olvidar a Ni-ki por completo, sólo quería superarlo. Porque las historias de amor nunca se olvidan, sólo se superan y se crean otras.

Y justo en ese momento Kim Sunoo estaba terminando su etapa de depresión, para ir a la de aceptación.

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Lamento la demora. :( No tengo excusa, simplemente no encontraba las palabras que quería reflejar en este capítulo y sinceramente aún no estoy conforme. Trataré de recordarme que esta es mi primera historia y que no puedo ser tan dura conmigo misma.

Espero que al menos lo hayan disfrutado, tal vez el siguiente capítulo sea el final.

Ruptura | SunKiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora