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HABÍAN PASADO ya unos días desde ese beso, y Sunoo no dejaba de pensar en ese beso, y lo que sintió, cada vez que lo hacía sus mejillas cogian un color carmesí.
Cada día estaba más cerca de su cita con Heeseung, y él estaba en un debate mental de si cancelarla o no.
¿Realmente Heeseung sentía algo por él? ¿Realmente a él todavía le gustaba Heeseung? ¿Por qué pensaba en ese beso si supuestamente no fue nada?
No fue nada. No fue nada. No fue nada.
Esas palabras se repetian en su cabeza cómo un disco rallado, se estaba intentando hacer creer que no fue nada, cuando si lo fue y él lo sabía, aunque no quisiera admitirlo.
De camino a la casa de Niki por otra clase de cómo "aprender a besar" seguía buscando una respuesta a sus preguntas, Niki le abrió amablemente.
Los dos se miraron, y se besaron de nuevo, pero este beso no fue cómo los anteriores, este fue uno tierno y dulce, en medio del beso, Sunoo sonrio, creyendo haber encontrado la respuesta a sus preguntas.
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