𝐓𝐡𝐞 𝐑𝐢𝐬𝐤 𝐂𝐡𝐢𝐥𝐝 | ShiIta

Capítulo 1

7:00 AM

Shisui caminaba cabizbajo hacia el Distrito Central, aparentemente había una misiónfuera de la ciudad para él, y como era el único Risk Child capacitado para lidiar con cualquier trabajo sin mucho esfuerzo, el Hokage lo había elegido a él.

Suspiró al estar frente a la puerta, dando dos ligeros toques antes de escuchar un ligero ''Pase'' Al entrar estaba el Hokage sentado en su escritorio, luciendo igual de impecable que siempre, Shisui había sacado una teoría de que el trasero del anciano estaba pegado al asiento, puesto que son contadas las veces que lo había visto levantarse de aquel lugar desde que ingresó por primera vez a la ciudad.

—¿Quería verme?— Preguntó Shisui al anciano, haciendo una reverencia al cerrar la puerta detrás de él, echando un vistazo a los militares que estaban presentes en aquella habitación, todos con máscaras que no dejaban ver ni dos centímetros de sus caras, a penas y podría mirarles una pequeña parte del cabello.

—Si, Shisui. Eres uno de los Risk Child mas experimentados del Distrito Norte, por ello te asigno este trabajo a tí, confío en que lo harás bien y no habrá ningún inconveniente.— Dijo Hiruzen con una expresión seria en el rostro.

—¿De qué se trata el trabajo?—

—Hemos recibido informes de que una serie de asesinatos han estado ocurriendo por años, y el grupo criminal que los ocasiona sigue suelto, afortunadamente sabemos donde se localizan, y quiero que tú vayas y los extermines.—

—¿A todos?—

—A todos... que no quede ni uno vivo, podría ser una amenaza. Sin embargo, se tiene la sospecha que hay un Risk Child que no ha sido ingresado a la ciudad aún, si es cierto tráelo aquí, vivo.— Soltó el anciano con la mirada fija en Shisui, quien escuchaba atento a sus indicaciones.

—Entendido, partiré ahora.— Dijo el pelinegro para luego dar un pequeño asentimiento con la cabeza.

—Puedes retirarte.— Dijo el anciano para luego volver la vista a los documentos que tenía encima de la mesa. Shisui hizo una reverencia de despedida y salió de aquel lugar, dirigiéndose después a la frontera de aquella ciudad aislada para traspasarla y emprender rumbo a Konoha, su destino.

Al llegar a aquel lugar vio a uno de los militares que estaban presentes con el Hokage, quien le entregó un documento con la ubicación de la sede de aquel grupo criminal que pronto ya no iba a existir, y cuando alzó la vista para dar las gracias, el militar se había esfumado. Shisui resopló y se puso manos a la obra, al subirse en un tejado en seguida encontró a la persona que estaba buscando.

Uchiha Madara.

Shisui sonrió de lado y bajó hacia aquel lugar que parecía las ruinas de un edificio que se había quemado tiempo atrás, encontrando a un pequeño grupo de lo que parecían ser subordinados de Madara. Shisui actuó rápido y los saludó, y en el momento en que lo miraron a los ojos, el pelinegro utilizó su habilidad para meterlos en una alucinación, la cual hizo que los subordinados de Madara comenzaran a matarse entre sí, y posteriormente, al resto de aquellos criminales, para posteriormente ir a buscar a Madara él mismo y hacer que se mate. Sin embargo Shisui sabía que Madara no caería sin pelear, por lo que se preparó, confiando en sus habilidades de combate cuerpo a cuerpo y teniendo armas blancas de emergencia se adentró a lo que sería el ''Despacho'' de Madara.

La pelea fue larga, pero al final consiguió que Madara cayera en su alucinación, pero de repente escuchó un ruido, acompañado de una suave voz de un hombre, Shisui asomó la cabeza solo para ver a un jóven con cabello negro y una máscara puesta, el de cabellos rizados chasqueó la lengua y frunció el ceño, dispuesto a llamar la atención del prácticamente único sobreviviente de aquel sicario para de este modo usar su habilidad en éste también, pero de repente escuchó un ''Bip, bip'' Que venía desde el dispositivo instalado en su cuello y manos, avisándole que pronto llegaría al límite de tiempo permitido para utilizar su habilidad. Shisui tragó saliva, queriendo que Madara terminara con la vida de aquel joven rápidamente, con lo que él no contaba era con que aquel miembro fuese tan bueno en combate cuerpo a cuerpo.

Cuando vio que Madara fue inmovilizado por el otro, Shisui comenzó a enojarse, y justamente cuando iba a intervenir, sintió una fuerte corriente desde su cuello que pasaba por todo su cuerpo que le obligó a dejar de usar su habilidad en Madara, para morderse el labio fuertemente para evitar hacer ruido, nunca le había pasado esto, y ahora sabía por qué los Risk Child que tienen un dispositivo de control como el de él tenian tanto miedo de usar su habilidad, los shocks de electricidad que emanaba aquel dispositivo podrían matarlo. Cuando el dispositivo se detuvo, Shisui respiró pesadamente, dispuesto a terminar con aquello de una vez por todas, tiró una piedra para llamar la atención de Madara y si era posible, la del otro joven para acabar con la vida de los dos al mismo tiempo, pero al ver las pequeñas quemaduras en el cuerpo de Madara, rezó porque el otro sicario no se volteara ''Con que ese es el Risk Child que nunca fue traido a la ciudad'' Pensó el pelinegro, pero salió de sus pensamientos al ver que Madara por fin lo miró, ya era demasiado tarde, y el líder de aquel grupo ya había caido en aquella ilusión.

Shisui ahora intentó desesperadamente disipar aquella ilusión, sin embargo no tenía la práctica suficiente y se tardaba en cortar las ilusiones. Con los ojos abiertos de par en par vio a Madara agarrando el roto filo de la katana que fue cortada a la mitad y encajándoselo al Risk Child que se suponía, debía llevar vivo a la ciudad, para posteriormente suicidarse con él mismo. Shisui por la ventana vio la furgoneta del gobierno de su ciudad, y antes de ir a subirse vio al otro joven salir lentamente de la instalación con un montón de sangre alrededor, Shisui para no ser visto bajó por la parte de atrás y se subió a la furgoneta, que seguía discretamente los pasos del malherido sicario, al ver a su ''Objetivo'' caer sin fuerzas a la dura acera el pelinegro actuó rápidamente y se bajó del vehículo para ir donde estaba él, luego cargarlo y regresar a la furgoneta negra, que arrancó de vuelta a la ciudad.

Al llegar a la ciudad, el pelinegro quitó la máscara del sicario para luego dejarla en un bolso, luego volteó a ver al joven y se quedó analizando sus facciones por un largo rato, para ser un criminal despiadado era muy apuesto, cuando miró sus ojos, las pestañas del chico le parecieron muy bonitas, su nariz, sus labios, su mentón. Shisui sacudió la cabeza al darse cuenta en lo que estaba pensando y reaccionando inmediatamente al recordar que el chico estaba en estado crítico y lo llevó al hospital para que atendieran sus heridas, cuando se lo llevaron en la camilla, el pelinegro se quedó en la sala de espera durante todo el tiempo que el joven estaba siendo atendido.

Shisui solo esperaba que el nuevo ingresado pudiera salvarse.

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Ah, aquí está el primer capítulo, creo que actualizaré esta historia semanalmente, o mas específicamente todos los viernes.

Si no entienden un choto no se preocupen porque en el próximo capítulo se va a explicar mejor lo de los Risk Child y la ciudad y el dispositivo y TODA ESA WEA.

Les agradecería que comentaran para saber que les gusta y que no y que me den ideas para que la historia sea mas de su agrado

Besitos.

Lavense las manos.

La escritora.