Propiedad de Uchiha Sasuke

Capítulo 4

Septimo: Las uniones entre un hombre y una mujer, son solo aprobadas por el Hokage. Cualquier unión no aprobada llevará un castigo severo para el hombre y la muerte a la mujer. 

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Su interior se revolvió furioso ante la perspectiva de que Sakura este con otra persona, con otro hombre que no fuera él. ¡Sakura le pertenecía! Y una vez una mujer era comprada, solo el dueño disponía de su futuro a menos que quisiera hacer una transacción con ella.

Miró una vez más a Sai, esperando que se formase su falsa sonrisa. Pasaron unos minutos más y no sonrió.

—No tengo paciencia para esto, Sai —Masculló frunciendo el ceño.

—Sabes que, si no me la das, volveré cada día. —Advirtió cerrando sus puños. —No me iré.

—Como sea —Respondió entrando y empujando la puerta. Una mano se interpuso antes de que llegara a cerrarla.

—¡No puedes hacer esto! —Sai estaba furioso, y Sasuke estaba por expulsar toda su ira contenida —¡Deja que escoja con quien quiere estar! ¡Te daré lo que pagaste por Sakura!

La sola mención de Sakura logró que su enojo aumentara aún más y abrió la puerta rápidamente lanzandose contra él, su sharingan activado brillaba y advertía peligro.

Ante la sorpresa de verse debajo el cuerpo de Sasuke, Sai recibió los primeros golpes directamente en el rostro. Cuando reacciono por fin devolvió varios más, con mucha más fuerza. Sasuke esquivaba los que podía con su sharingan.

—¡Estúpido egoísta, tu no quieres a Sakura! —El golpe fue directo en su mandíbula.

—¡Tú que sabes! ¡Ella es mía, yo la compre! Es de mi propiedad —Gruño entre dientes mientras seguía golpeando su cara en cada oportunidad. —No necesito quererla, solo debes saber que me pertenece y no te la daré.

—Sabes que no te elegiría, no eres nada más para ella que su amo —La mano del Uchiha fue a su cuello y comenzó a apretar fuertemente.

—No te volverás a acercar a ella —Su mano se endureció aún más en su cuello al ver que el rostro de su compañero de equipo no hacía nada, ni una mueca. —Nunca.

Una mano lo agarró del brazo y lo lanzo hacia atrás logrando que quedara sentado en el suelo. Sasuke miró al culpable que no era otro que Itachi.

El mayor de los Uchiha suspiró y miró a Sai que seguía con cara inexpresiva, se levantó y con un gesto poco usual de él, se cruzó de brazos. Itachi enarco su ceja al ver que su cuello comenzaba a tener marcas, aquello debía doler.

—No son niños, dejen de jugar así —advirtió antes sonreírles a ambos. —Sasuke, no seas tan desagradable con tus amigos. Saben que debemos tener una buena relación.

Ante la cara sorprendida de Sasuke, invitó a Sai a entrar a la casa de su hermano menor.

—¿Quién se cree? Invitar al bastardo de Sai ¡A mi casa! —Terminó por entrar detrás de ellos y se sentó en un cojín de la sala frente a Sai.

—No te molestes, Sasuke —Entró una vez más a la sala después de ir a la cocina por algo de beber. —Es solo para que aclaren sus cosas como se debe. —Se cruzó de brazos y se sentó entre Sai y Sasuke, mirando al primero. —¿Y bien?

—Quiero estar cerca de Sakura —Respondió ante la directa pregunta del mayor de los Uchiha.

Itachi miró con advertencia en dirección a su hermano al ver que estaba por lanzarse hacia el nuevamente. Sasuke cerró sus puños y contó hasta diez mentalmente.