Si, ellos regresaron ese mismo día y cuando aterrizaron el sol brillaba, pero estaban un poco cansados por lo que decidieron ir a la gran casa de los Min para descansar.
Jimin y Yoongi fueron directamente a la habitación de este y nadie dijo nada, pues comprendían la situación. La joven pareja no había hablado mucho en el avión, pues Jimin solo quería estar abrazado a Yoongi y este no le prohibió el gesto alguno.
Cuando Jimin llego a la habitación de Yoongi se lanzó sobre la cama de este de panza, notando a Yoongi dejar las maletas junto al sofá de la pequeña sala que estaba en su cuarto. Claro que Jimin había estado en esta antes, aunque si, nunca ellos dos solos, por lo que se sentía un poco diferente, pero todo quedo absorbido cuando noto una expresión extraña en Yoongi.
— ¿Sigues molesto conmigo?—. Pregunto Jimin al mayor que le miro con rapidez.
— No es molesto como me siento—.
— ¿Entonces?—. Pregunto Jimin mientras se sentaba en la cama.
— Solo creo que no fuiste responsable con todo esto y me enoja no entenderte—.
— Hyung, es que... —. Yoongi decidió acercarse hasta Jimin quien ni siquiera sabía cómo responder a lo dicho. — Lo siento—. Termino diciendo.
— No hay que disculparse, debemos descansar, hay mucho por hacer después—.
— ¿Mucho?—.
— Hay que buscar donde vivir—.
— ¿Vivir?—.
— Claro, ¿o esperabas que nos quedáramos viviendo con nuestros padres?—.
— Bueno, vivir con Tae suena divertido, pero comprendo—. Todo era un poco nuevo para él.
— Pero ver casas y así es complicado, además, yo no tengo ahorros—. Comenzó a contar mientras fruncía un poco el ceño.
— Creo que debo dejar de comprar cosas que no necesito—.
— Mis padres dijeron que ese sería nuestro regalo—.
— ¿Cuál regalo?—.
— De bodas—. Respondió. — Y tus padres dijeron que pagarían esta—. Se refería a la fiesta y todo eso.
— Bien—. Jimin sabía que solían hacerse las cosas así en donde vivían, pero no podía evitar sentirse un tanto incómodo.
— ¿Qué sucede?—. Claro que Yoongi noto el cambio de expresión en Jimin.
— Siento que tus padres van a enloquecer y nos regalaran una casa enorme—.
— ¿Y eso tiene algún problema?—.
— Bueno, una casa grande requiere más tiempo de limpieza—.
— Pero somos dos, lo haríamos pronto, además podríamos tratar de encontrar algún tipo de ayuda—.
— Eso suena bien, pero, ¿podrías convencer a tus papás de que no fuese tan grande?—.
— Ellos no van a escoger la casa, compraran la que quieras—.
— ¿Eso quiere decir que debemos empezar a buscar?—.
— Exacto y organizar todo para poder casarnos—. Bien, Yoongi obviamente no se sentía para nada tímido con el tema, pero Jimin si, así que bajo un poco su rostro y luego solo escucho como Yoongi rebuscar en los cajones, por lo que rápidamente volvió sus ojos a este.
Jimin le había analizado un poco ya en el avión, se notaba cansado y como no, se había esforzado por terminar cuanto antes las actividades que le había obligado a separarse así y luego el enterarse de todo le hizo tomar el primer viaje mientras estaba en una incertidumbre bastante tortuosa, que no mejoro pronto, porque llego para recibir tal noticia, por supuesto que Yoongi dudo de que fuera verdad, pero los médicos habían sido tan seguros en decir que era una claro intento de suicidio que no pudo evitar sentirse mal de haber ocasionado tal cosa en Jimin y aunque ahora ya sabía toda la verdad, su lobo seguía sintiéndose un poco mal, porque bueno, en cierta parte se culpaba de la situación porque estaba seguro que si hubiese estado con Jimin nada de esto hubiese pasado.