Alma gemela.

23 1 0
                                    

No me dolió la traición, más me dolió que tu amistad eterna durará menos que el lápiz para mi nueva novela.
Tú que dijiste acompañarme siempre, ¿dónde estás ahora?
Yo ya sabía que los mejores amigos eran tan reales como el amor a primera vista y el beso perfecto, pero aún así creí en ti, te di mi corazón, mi tiempo y mi espacio. No sé que hice mal, no sé por qué me olvidaste, por qué me cambiaste, por qué me dejaste. Yo que siempre estuve cuidándote, leyéndote por largas noches aunque los ojos me pesaran, todas las tareas y trabajos con los que no cumplí por estar contigo, los mensajes y las llamadas. Yo que busqué siempre apoyarte y estar contigo, ser tu mejor amiga y nunca abandonarte. Yo que callaba mis problemas para aconsejarte en los tuyos, que secaba lágrimas mientras pensaba como ayudarte y olvidaba como me habían gritado en casa. Te di mi tiempo en vez de a cualquiera. Yo que tenía más abandono y soledad mientras tú buscabas un amor perdido, y por ello te apoyaba. Mientras eras mi única mejor amiga por la que yo daría todo, yo era una de tus amigas. A la que le dijiste que amabas. Igual es culpa mía, yo siempre tan confiada, creyente, pensando que ayudando a otros me devolverán el favor después; no de nuevo, ya no. No necesito a los amigos más que al oxígeno, los demás solo te lastiman mientras tu buscas ayudarles, te olvidan cuando tú estás en problemas, no pretenden preocuparse por ti, sus problemas van a ser siempre más grandes. Para ti, yo siempre voy a ser la exagerada negativa que no puede notar los bellos momentos de la vida y solo se enfoca en lo malo que le pasa. Eso es lo que jamás entendiste, el mal era tan grande que cegaba mis ojos de la poca bondad que había. Pero eso se acabó, el sufrimiento ya no existe, porque no me importa, ya no importa nada, el dolor fue tan grande que rasgó la tela de mis ojos y ahora puedo ver todo hermoso, ya no hay dolor. Pero tampoco hay amigos, tampoco tú.
Las almas gemelas no existen, porque la gente cambia, te miente y se va.

A Medias.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora