Uno ve que se aproxima y la toma, atento que se escapa y no vuelve más, se asegura de que la notes, como acote de un gran Rap, uno siente, no debes dejarla pasar, porque ella no perdona que la dejes pasar, le alegra que la tomes porque ella te enseña a bailar
pienso y se me va de las manos, a veces dormir con los peces aparece temprano, uno no recuerda la playa que tiene al lado, y vive preso de su continuo torturado, me imagino las cosas que haré, si algún día se marcha mi ser, presentarme en sueños volviéndome el dueño de la mente de mi mujer, para avisarle que estoy bien, para secar sus lágrimas, ayudar que avance su página, enseñarle una chance de crecer con la practica
déjame amarte un rato, porque nunca me canso de no cansarnos nunca, de contigo, tocar sin tacto.
En los gritos no hay ciencia, y no sentiré el espanto, porque capto, que un día de mierda lo tienen hasta las eminencias.
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Sombras de lo que Fui Claridades de lo que seré
PoesiaEl círculo de un infierno que parecía la de un Arcángel