•~Mexusa~• // Finalizada

Cap. 12

Durante el camino ninguno habló mucho, me sentía muy mal de haber sido tan ciego y no haberme dado cuenta de lo tóxico que era Rusia conmigo... que idiota fui. Una vez llegamos a casa de México bajé mis cosas y las llevé a la habitación, en la cual posteriormente me quedé encerrado pensando. Luego de un par de horas salí a la cocina para hacerme un té, ahí me encontré a México con una bolsa de hielos puesta en la mano.

-estas bien?- le pregunté.

-si, solo me duele un poco- contestó.

-fue cuando golpeaste a Rusia?-

-eso creo, al parecer lo golpeé muy fuerte- respondió soltando un pequeña risa.

-no te había dado las gracias por defenderme... de nuevo- dije.

-lo haré las veces que necesites- dijo sonriendo amablemente.

-se que lo haces para ayudarme pero... siempre terminas lastimado por mi culpa...- respondí.

-tranquilo, nadie me obliga a hacer esto, yo lo hago porque quiero ayudarte- contestó dejando la bolsa con hielos a un lado.

-tengo suerte de que seas mi amigo- dije.

-claro... amigos...- le oí decir a México en un tono no muy animado... supongo que está cansado, no?

-que pasa, estás cansado?- le pregunté.

-no... es solo que... nada, olvidalo- respondió poniéndose algo nervioso.

-vamos, dime- insistí.

-no tienes hambre? Yo si, deberíamos pedir pizza- dijo evadiendo el tema.

Yo quería saber que le sucedía pero no puedo resistirme a una sabrosa pizza así que deje el tema de lado. Al final pedimos pizza de peperoni y nos sentamos a comerla mientras veíamos la tele. Mientras comía note que ya no pensaba en Rusia, porque cuando estaba con México sentía que mis problemas desaparecían.

Luego de un rato ambos terminamos de comer pero quería seguir pasando tiempo con el... no sé porqué pero cuando estaba con México me sentía bastante a gusto, casi como si fuésemos pareja... que estoy pensando? Solo somos amigos. Al final lo convencí de ver una película, y ahí pasamos una hora y media. Finalmente cada uno se fue a su habitación para descansar.