Pulsera de la amistad

No estamos en Krypton

Pasaron dos años más y las cosas salieron bastante bien para Kara. Fue aceptada en la escuela de su elección con el comentario de que su portafolio estaba fuera de este mundo. Si tan solo supieran. Las cosas con Lena habían comenzado a crecer... quizás distante es la mejor palabra. Lena todavía estaba esperando recibir noticias de una universidad, pero era el MIT y en el otro lado del país, por lo que Kara no tenía idea de por qué su esposa había solicitado allí. Probablemente fue para saciar a la Sra. Luthor.

Quedaba menos de un mes en su último año y las propuestas estaban en todas partes una vez más. Kara se abrió paso a través de un pasillo lleno de globos con Lena detrás de ella.

"Está bien, eso es ridículo", Kara se bajó las gafas lo suficiente como para verificar que el área estaba desprovista de humanos antes de avanzar. "Me siento mal por los niños que tienen que pasar por todas estas ridículas demostraciones de afecto. ¿No crees?"

"Oh, no lo sé. Algunos de ellos son algo dulces. ¿No te gustaría que alguien especial, alguien que realmente te importa, hiciera un gesto para que toda la escuela supiera cómo se sienten?"

"Supongo", admitió Kara. "Probablemente sea importante para algunas personas. Me alegro de saber con quien voy al baile de graduación".

Lena se detuvo después de que Kara tirara de ella durante dos pasos como si fuera un juguete para niños pequeños "¿Tu... ya tienes pareja?" El temblor en su voz apenas se percibía.

"Lena no seas rara, voy contigo".

Lentamente, como una flor que se abre al sol después de una lluvia primaveral, una sonrisa floreció en el rostro de Lena "¿Quieres ir al baile de graduación conmigo?"

"Por supuesto, somos BFFs. Tenemos que ir juntas"

"Oh, mejores amigas". Con un profundo suspiro, Lena se estudió las manos. Finalmente sonrió y dijo: "Tengo suerte de tenerte en mi vida, Kara".

"Por siempre".

"Por siempre", asintió Lena entrelazando sus dedos con los de Kara. "Claro, vayamos juntos al baile de graduación. Suena... divertido" Y eso fue todo... al menos en la mente de Kara, al menos hasta la llamada telefónica que inició una cadena de eventos que cambiaron su visión del mundo para siempre.

Era un domingo por la tarde y Lena estaba recluida en algún lugar estudiando para los exámenes finales. A Kara le pareció ridículo ¿Qué iba a aprender que no supiera ya? Pero, como de costumbre, la Sra. Luthor insistió.

La sonrisa que tenía Kara cuando contestó el teléfono se desvaneció rápidamente cuando vio el nombre en su identificador de llamadas. Kara dudó en responder, pero dado lo inusual que era la llamada, su curiosidad finalmente la dominó.

"¿Qué quieres?"

"Hola también a ti, Danvers", respondió una voz que de alguna manera se las arregló para ser tanto sensual como irritante "¿Qué hay de nuevo?"

"Mira, Verónica, no tengo tiempo para el juego que estás jugando. Dime por qué llamas o colgaré ahora mismo".

Verónica Sinclair era tan fea por dentro como hermosa por fuera e incluso Kara tuvo que admitir que era deslumbrante. Se pavoneó por la escuela con gracia, marcando su territorio con toques sensuales y miradas maliciosas. Solo le tomó pasar una mano por el brazo de Lena una vez para que Kara tuviera una conversación bastante fuerte y directa con Verónica después de la escuela. Fue una conversación del tipo de amenaza no tan vacía, y aunque Verónica había retrocedido, también se había mantenido lo suficientemente cerca de la órbita de Kara como para mostrar sus garras en ocasiones.