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"Nunca olvidaré el momento en que me di cuenta de que te amaba".
ENTRANDO EN mi casa vacía, suspirando contenta, tiro mi bolsa de lona al suelo.
Caminando penosamente hacia mi habitación, dirigiéndome al baño, inmediatamente enciendo la ducha, entro mientras el agua tibia se siente satisfactoria contra mi piel.
Estoy física y emocionalmente cansada. No todos los días tienes que dormir en un hotel espeluznante famoso por la mayor cantidad de suicidios y donde tu mejor amigo casi se suicida.
Todo es un desastre. El druida oscuro, la manada alfa, Derek presumiblemente muerto.
Dios, solo un día normal. Es todo lo que pido.
Apago el agua, el baño se llena de vapor, me envuelvo con una toalla y salgo del baño a mi habitación.
Poniéndome unos pantalones cortos de pijama y una camiseta sin mangas, me cepillo el cabello mojado, sin sentir la necesidad de secarlo.
Dejándome caer en mi cama, la suavidad me envolvió, haciéndome sonreír de satisfacción.
No he dormido bien en días. Sería bueno dormir un poco.
Cerrando los ojos, casi durmiéndome, casi salgo de la cama de un salto, el timbre de mi teléfono celular me asusta como la mierda.
—Jesús.— murmuro, agarrando mi pecho, agarrando el teléfono de mi mesita de noche.
Al darme cuenta de que es Stiles quien me llama, no lo pienso dos veces, aceptando.
—Oye.— el cansancio de mi voz es evidente, esto inmediatamente preocupa a Stiles.
—¿Qué pasa? ¿Estás bien? Lo hice-
—Stiles, estoy bien.— Interrumpo rápidamente al chico espástico, una pequeña risa abandona mis labios mientras lo escucho suspirar al otro lado de la línea.—¿Entonces que hay de nuevo?
—Bueno, además de la desaparición de dos médicos que trabajaban en el memorial de Beacon Hills y de que Danny tuviera muérdago en su organismo, nada más.
Casi me ahogo con esto, la información me está pasando factura.
—¿Danny está bien?— Murmuro, colocando el teléfono en el altavoz, sentándome cruzado en mi cama.
—sí, Ethan lo llevó al hospital a tiempo.
Respiro un suspiro de alivio ante esto.
Conozco a Danny desde que tengo uso de razón. Cada vez que Lydia invitaba a Jackass, me refiero a Jackson, Danny a veces me acompañaba y me hacía compañía.