CAPÍTULO ÚNICO

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Historia dedicada a SaritaFelicidad

La mañana estaba realmente cálida, mientras la ciudad parecía estar sumergida en una calma pacífica y acogedora. El cielo gris se encontraba un poco despejado, con las nubes abultadas acumulándose en la lejanía, escondiéndose en el horizonte. Las ráfagas, un tanto gélidas; le daban a entender que el frío invierno estaba cerca, las cortinas de su departamento se movían con elegancia al compás del viento que entraba por el gran ventanal, en sus manos posaba una enorme taza de chocolate caliente, el humo se desvanecía en el aire, mezclándose con la cálida brisa y así acariciando sus mejillas; sus pies estaban cubiertos por sus pantuflas de conejito y su pijama acolchonada le daba ese toque cálido que aceptaba gustoso.

Louis se levantó del sillón que quedaba al borde de su gran ventanal para ir directo a su habitación, el aroma que se mezclaba dentro era atrayente, acogedor y agradable para su olfato; una combinación perfecta de su fragancia, junto a la de su alfa y su cachorro. Todo era tan apacible que Louis muchas veces se encontró a sí mismo pasando más tiempo del debido en su propia habitación.

La mirada del omega quedó fija hacia la cuna que estaba en una esquina y en el bultito que se movía ansioso al percibir su aroma.

—¿Mamá? —la voz adormilada de su cachorro le derritió el corazón y le sacó una sonrisa dulce, el castaño se acercó hasta que su cuerpo estuvo al borde de la cuna. Desde ese lugar podía ver mejor los rizos caoba claro de su bebé esparcidos por todos lados.

—Buenos días mi lucecita —Louis tomó a su cachorro entre sus brazos para sacarlo de la cuna, su pequeño rápidamente encontró un lugar en el hueco de su cuello—. Hoy tendremos un día muy divertido.

—¿Adwy? —preguntó el cachorro cerrando sus ojitos verdes. Sus diminutas manos se movieron hasta tomar el dedo meñique de su madre y encerrarlo en su puñito.

Louis soltó una risita antes de responder, las acciones inesperadas eran lo que más apreciaba de su pequeño bebé. Aiden sin duda lo había cautivado desde el primer instante que lo tuvo entre sus brazos; los ojos verdes idénticos a los de su padre, le recordaban día con día que ahora tenía la vida que siempre deseó. La familia que había anhelado tanto desde un principio, hoy se materializaba en un pequeño de sonrisas tiernas y mejillas sonrojadas.

Aiden portaba un gran carisma nato y aunque tenía un pelicular don de meterse en problemas, Louis y Harry siempre estaban ahí para sacarlo de apuros. Su cachorro era una inquieta bolita de masa que se movía por toda la casa mordiendo todo a su paso, a pesar de que Louis había invertido mucho en comprar cremas para sus encías: para calmar la picazón e inflamación que provocaban la salida de sus primeros dientecitos, Aiden parecía disfrutar más de morder cualquier cosa que no tuviera la frase Baby Orajel escrita en letras enormes. Sin embargo, nada podría hacer que el omega dejará de adorar a su travieso; aun cuando su hijo prefería ver Marvel antes que Harry Potter, lo amaba.

Era su pequeño muggle favorito. Su pequeña mandrágora.

—¿Adwy? —volvió a cuestionar el cachorro con voz dulce. Escuchar a su hijo preguntar por su padre alfa al despertar, llevaba un regocijo al alma del omega de forma instantánea, era una rutina hermosa que se había convertido en parte esencial de sus mañanas.

—Papá se fue a trabajar —respondió llevándolos a ambos al cuarto de baño—. Pero nosotros vamos a tomar un baño de burbujas y luego iremos a desayunar ¿Te parece bien mi amor?

Aiden asintió emocionado, dejando ver sus dos dientecitos blancos.

Louis tomó los juguetes favoritos de su hijo que se encontraban en una canasta color azul y preparó la tina de agua con la temperatura indicada. La enorme habitación se llenó de burbujas danzantes en el aire y el olor a lavandas frescas llenó sus pulmones, a Louis le había llevado un tiempo sentirse seguro realizar una acción simple como bañar su bebé, le había tomado meses el dejar de tener el miedo constante de ahogar a su pequeño dándole un baño.

Chispitas y galletas (L.S)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora