Hawk Moth Y Tú

Hawk Moth

Mi vida se ha vuelto rutinaria, salgo de casa, voy a trabajar, alguna persona es akumatizada en cualquier parte de la ciudad, Ladybug y Cat Noir lo derrotan, regreso a casa y todo está bien.

En realidad ya me estoy acostumbrando, ahora tengo más ocupaciones y responsabilidades.

He hablado con mis padres, me dijeron que ya ha pasado suficiente tiempo para que me adapte a la ciudad y me independice, así que ya no me dejarán más dinero, pero eso no me preocupa, pues ahora tengo un empleo y un compañero de piso.

Debería tomarme un descanso, conocer gente, dar un paseo por la ciudad, pues paso mucho tiempo en casa.

Wayhem me comenta que ya ha llegado el recibo de la renta. No tengo en problema en pagar, voy al banco a hacer el depósito y vuelvo a casa. Estando ahí, Wayhem me propone salir a hacer algo divertido, quizá ir al cine, enseguida acepto, pero no tardo en darme cuenta de que no tengo suficiente dinero para pagar mi entrada y mis palomitas.

Wayhem me dice que no me preocupe, él invitará las cosas, yo acepto y le sugiero que la siguiente vez invitaré yo.

Salimos juntos y pasamos un rato agradable, al entrar a la sala, observo que la mayoría va con su pareja, de abrazan, se muestran cariño, y me llena de nostalgia y suspiro. Cómo me gustaría enamorarme, tener a alguien con quién compartir momentos especiales.

Entonces volteo a ver a Wayhem y muestro una pequeña risa, mientras pienso que eso no podría ser, él no me atrae en lo absoluto, además no es mi tipo.

Se apagan las luces y lo primero que dale en la pantalla es un anuncio.

-Adrien, la fragancia -repite emocionado los diálogos del comercial.

Y yo solo puedo pensar en Agreste, Gabriel Agreste, y esa poderosa voz que me hace temblar.

Al terminar la película vamos por un helado y conversamos un rato, entonces regresamos a casa.

Ya ha anochecido, me voy a la cama temprano porque me levantaré temprano para hacer un encargo que me ha pedido el jefe, y tendré un pago extra.

Intento cerrar los ojos, pero ese póster que me mira directamente no me deja dormir.

-No puedo creer que exista un hombre tan bello -Suspiro-. Ojalá algún día conozca a alguien como él.

Reviso mi billetera y me doy cuenta de que tengo lo suficiente para alimentos y necesidades básicas durante la semana, pero apenas y me alcanza para consentirme, y mucho menos para invitar a mi amigo.

En ese momento, comienzo a recordar cuando vivía en casa de mis padres, todo era tan fácil, tenía mucho tiempo libre, varios amigos, solventaban todos mis gastos, cómo los extraño.

Ahora tendré que trabajar más para vivir mejor, no sé en qué momento decidí independizarme tan lejos de mis seres queridos, pero no me puedo rendir.

Entonces sucede que una nostalgia y una frustración se apoderan de mí, comienzo a llorar en silencio mientras presiono mi billetera con fuerza, y ocurre algo que no me esperaba.

-Hola, _____, yo soy Hawk Moth.

Ahí estaba otra vez, esa imponente voz, profunda y misteriosa, tan maravillosamente bella. Esta vez no perderé mi oportunidad.

-Te invade la frustración que sientes por falta de dinero, no puedes divertirte ni ayudar a tus amigos, yo te daré todo el dinero que quieras, pero a cambio, solo te pido que me entregues los miraculous de Ladybug y Cat Noir.
-No, Hawk Moth, no es dinero lo que quiero.
-Es cierto, yo te recuerdo. Hace un tiempo rechazaste mi akuma, pero esta vez te daré lo que quieres, te daré todos los poderes que tú quieras, por todo el tiempo que quieras, lo único que tienes que hacer es entregarme los miraculous de Ladybug y Cat Noir.
-No, Hawk Moth, solo quiero una cosa.
-Dime lo que quieras, y te lo daré, a cambio de los miraculous.
-Hawk Moth, yo quiero conocerte, quiero verte, quiero saber quién eres.

Era obvio, Hawk Moth no revelaría su identidad a una persona desconocida, pero justo cuando el akuma estaba a punto de huir, lo tomé con más fuerza y lo mantuve.

-Espera, Hawk Moth. No debí pedirte
eso, lo siento, sé que tus intenciones son buenas. Te ayudaré a entregar, solo quiero pedirte una cosa. Quiero conocer a Gabriel Agreste.
-Lo que pides es algo complicado, Gabriel Agreste es un hombre muy difícil, y nunca sale en público, pero te doy mi palabra de que tendrás la oportunidad de conocerlo, si me entregas los prodigios de Ladybug y Cat Noir.
-No quiero tu akuma, Hawk Moth, solo quiero conocer a Gabriel Agreste, y solo entonces te ayudaré a conseguir los miraculous, tengo el plan perfecto.
-Te daré la oportunidad de conocer a Gabriel Agreste, no la desaproveches. Mañana habrá un desfile de moda, pregúntale a tus amigos, ellos te informaran, debes asistir y tendrás tu oportunidad, lo demás dependerá de ti.

A la mañana siguiente me levanto con toda emoción, hoy es mi gran oportunidad, no puedo perderme esto, hoy conoceré a Gabriel Agreste, debo prepararme.

Salgo del trabajo muy temprano, y me infiltro en el desfile de moda. Adrien Agreste es el principal modelo.

Durante el desfile, algo inesperado ocurre, la famosa Audrey Bourgeois es akumatizada como la reina del estilo. En seguida me oculto, creo que Hawk Moth ha encontrado a otra persona para llevar a cabo su plan y cambió de opinión conmigo, en el fondo sabía que no funcionaría.

Me quedo observando todo lo que sucede, la reina del estilo convierte en estatua a Adrien Agreste, y posteriormente lo secuestra. Esto no es problema, solo debo esperar a que Ladybug y Cat Noir nos salven a todos.

Cuando por fin todo vuelve a la normalidad, el desfile de moda se reanuda, y mientras Adrien Agreste está modelando los diseños, algo inesperado ocurre. Era todo lo que deseaba, lo único que quería, ahí estaba él, de pie frente a la multitud, tan imponente, tan varonil, tan perfecto. Ahora lo entiendo todo, Hawk Moth cumplió su palabra. Él envió a la reina del estilo a secuestrar al hijo de Gabriel Agreste, solo así se vería obligado a ver por su bienestar y salir a la luz.

Por fin lo tenía frente a mis ojos, en cada paso que daba energía esa perfección que le caracteriza. Se acerca lentamente, se detiene unos segundos frente a Adrien Agreste y lo abraza fuertemente.

Todo el público se encuentra muy emocionado, es la primera vez que el famoso diseñador de modas, Gabriel Agreste, se presenta en público después de tanto, tanto tiempo; y yo, yo estoy aquí para poder apreciarlo, no podría sentir mayor emoción que esta.

Ahora es mi oportunidad, no puedo perderlo de vista, me acerco lentamente al público para verlo de cerca, están tan distraídos con tan magnífico evento que nadie nota mi presencia, ya que me he infiltrado.

Justo ahí, en tan emotivo acto, Gabriel Agreste levanta ligeramente la mirada, esperaba una señal. Entonces ocurre, nuestras miradas se cruzan lentamente y me paralizo. No lo dejaré ir.