Capítulo XV

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NAMJOON

El dragón blanco se abalanzó en nuestra dirección, y si no hubiera sido por mis rápidos reflejos, su poderosa mandíbula me habría partido por la mitad. Tan pronto como lo vi corriendo en mi dirección, me lancé a un lado y me aparté del camino, pero sentí la ráfaga de aire cuando pasó a mi lado, listo para atacar. Malvadamente delgados y afilados dientes curvados hacia afuera, me recordaron a una serpiente venenosa. Sus escamas reflejaban la áspera luz del techo y brillaban, casi cegadoras, de blanco puro, empañado solo por las temibles garras negras que perforaban el piso de cemento.

Me recuperé y volví a ponerme de pie a tiempo para ver una explosión de color. Un viento azotó la habitación y se hizo tan intenso que casi me derribó. Un ruido terrible, como una nave espacial cruzando un túnel de viento, atravesó mis tímpanos. Los dos dragones restantes, Taehyung y Yoongi, habían liberado a sus criaturas tan rápido que apenas vi la transición entre el hombre y la bestia.

Taehyung, con sus escamas azules brillando en los LED del techo, rugió mientras atacaba sin miedo al dragón blanco. Sus dientes crujieron en el cuello de éste, hundiéndose a través de sus gruesas escamas blindadas. El dragón blanco chilló y sacudió la cabeza hacia un lado en un intento de escapar de la mordida de Taehyung, pero Taehyung lo soportó. Mientras lo hacía, Yoongi abordó al dragón en el suelo.

¿Qué se suponía que debía hacer contra algo así?

Miré a través de la habitación para encontrar a Jungkook luchando para levantar a Chanyeol del piso, ahora una estatua de piedra en lugar de carne y hueso. Me apresuré a cruzar la habitación para ayudarlo, con la esperanza de que pudiéramos evacuar mientras los demás peleaban, pero en el momento en que llegué al lado de Jungkook, una ráfaga corrió por el suelo. Levanté la cabeza a tiempo para ver un destello azul a la izquierda. Taehyung se estrelló contra la pared, sacudiendo toda la habitación. Una grieta atravesó el techo y trozos comenzaron a desmoronarse. Un trozo de material del tamaño de mi cabeza cayó en picado desde la grieta del techo y se hizo pedazos a unos metros de donde estaba parado. A este ritmo, no tendríamos que quemar el lugar, se derrumbaría sobre sí mismo.

—¡Jungkook! —grité. Agarré a Chanyeol por las piernas, tomando algo de peso para ayudar a Jungkook a cargarlo, pero Jungkook negó con la cabeza. Sus ojos estaban llorosos.

—No hay tiempo —pronunció. Bajó a Chanyeol, me dio una última mirada, luego abandonó su forma humana. No hubo un período de amortiguación entre ser humano y ser dragón, su piel se rasgó cuando sus huesos se apresuraron a tomar sus nuevas formas, y escuché el horrible sonido de su cuerpo desgarrándose. Jungkook gritó de dolor, pero el sonido se interrumpió cuando su mandíbula cambió y ya no pudo soportar el ruido. Me di cuenta de que su interior también estaba cambiando, obligado a moverse y crecer antes de que estuvieran listos. Vi el dolor en sus ojos, y también me destrozó.

—¡Jungkook! —lo llamé.

En un destello de escamas negras teñidas de púrpura, Jungkook se había ido. Atravesó la habitación y se lanzó contra el dragón blanco. Yoongi ya no estaba allí, parecía que cuando Taehyung había sido arrojado a través de la habitación, él también tuvo el mismo destino. Se había derrumbado en una pila en una pared opuesta, revolviéndose lentamente a medida que el impacto se desvanecía. Jungkook entró en acción para protegerlo.

Si el Gremio de Cazadores había estado en posesión de un dragón todo este tiempo, ¿por qué no lo sabía? ¿Por qué no lo sabíamos todos? ¿Y por qué querría el Guardián Maestro mantener viva a una criatura tan supuestamente peligrosa?

No podemos matarlo, la voz de Yoongi hizo eco en mi cabeza, y aparté mis ojos de la feroz batalla entre Jungkook y el dragón blanco para ver cómo Yoongi se levantaba del suelo. Su mente está cerrada... No puedo comunicarme con él. Algo está mal.

✿੭┆だまされたアルファ ៚ NAMKOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora