fan | minsung

Especial Changlix.

Changbin suspiró una vez cerró la puerta de su hogar a sus espaldas, camino cabizbajo hacia la habitación que compartía con su pareja y simplemente se dejó caer sobre la gran cama, totalmente cansado, se sentía desgastado mentalmente cada vez se discutía con Félix, es como si algo dentro de él se apagaba y no lo dejaba estar tranquilo hasta finalmente arreglar las cosas. Y sinceramente, no tenía idea de que tanto tiempo podrían estar peleado, no podía comparar esta discusión con otras que hayan tenido antes porque en verdad esta vez las cosas se fueron de sus manos, no es como si hubiera discutido un poco, porque si fuera así que lo más probable es que uno de ellos terminar durmiendo en habitación de métodos para luego disculparse el día siguiente. No, esta vez fue tan fuerte que el rubio ni siquiera quería estar en casa, y le dolía, le dolía mucho la situación y la razón, porque más que peleen sabía lo terco que era Félix con el tema, ¿Qué más podía hacer él? Quería que Félix lo entendiera, que no estaba listo aún para dar un paso tan grande como ser padre ¡joder! apenas habían comenzado a estabilizar una vida juntos ¿por qué la necesidad de apresurar las cosas?

Y no, Changbin no odia a los bebés, pero tampoco cree que este sea el momento indicado para pensar en esas cosas, son personas ocupadas con trabajos que implican estar dispuestos las 24 horas del día, su vida como pareja, a pesar de ser estable tanto emocionalmente como económicamente también era ajetreada, ¿cómo podrían criar un bebé? Eso fue algo que sacó a colación durante la discusión, pero Félix parecía tan ensimismado en creer que Changbin no lo amaba lo suficiente como para querer formar una familia con el que simplemente ignoró sus palabras y argumentos, al final era el quién quedaba como el malo de la película.

Changbin rodó por la cama hasta quedar a boca arriba era tan extraño no escuchar ningún ruido en casa, no sentir el calor que emanaba Félix cuando se acostaba a su lado y se abrazaba a él como si fuera un gran bebé koala, no pude evitar sonreír al recordarlo, solos había pasado unas horas y ya lo extrañaba como los mil infiernos.

Sin poder evitarlo se levanto de la cama y fue por su chaqueta, la cual lo había dejado colgada sobre la mesa de escritorio, de ahí sacó su celular, suspiró triste a notar que no había ningún mensaje de Félix, ¿se quedará a dormir entonces? tal vez debería llamar a Jisung para preguntarle sobre el tema.

-H-hola?? ¿Changbin hyung?-La dulce voz de Jisung se hizo presente al otro lado de la línea, Changbin inició el señor escucharlo tan agitado-¿Pasa algo?

-Sólo... quería saber como estaba Félix-murmuró Changbin-, y también saber si se va a quedar esta noche contigo, no me ha enviado ningún mensaje así que quería preguntarte-se sentía torpe el hablar y no entendía porqué, pensó que tal vez sonaba muy ridículo preguntar por Félix cuando no han pasado más de dos horas, pero en verdad lo extrañaba mucho.

-¡Minho!-el mayor saltó de su lugar a la escuchar el grito de Jisung al otro lado de la línea seguido por la estruendosa risa de Minho-. Lo siento hyung...-habló apenado el castaño y Changbin no pudo evitar soltar una risita, la relación de Jisung y Minho le parecía cómica-. Y sí, Félix está bien, dijo que quería quedarse a dormir por hoy, tal vez mañana vuelva a casa-Changbin no pude evitar sentirse más desanimado ante ese 'tal vez'

-Él... ¿sonaba molesto? es decir-Changbin estaba divagando demasiado, pero realmente no sabía cómo expresar sus palabras.

-No diría molesto, más bien triste... creo que el en verdad quiere ser padre pero necesita entender quién es el momento, espero que con la conversación que tuvimos el pueda comprenderlo-Ah, Changbin se sentía mal escuchar eso, no quería ser quién le quite a su novio la ilusión de querer formar una familia-, pero hyung, tampoco seas tan directo rudo con el... creo que es algo que también le hizo sentir mal ¿sabes? después de todo eres su pareja y le puede resultar un poco chocante ver qué tú no tienes tanto interés en ser padre como él-Changbin se sobó la sien ¿Félix había tomado sus palabras de esa forma? aunque ahora que lo pensaba, tal vez si se había pasado un poco con todo lo que dijo, joder, también le había cagado, debió ponerse en los zapatos de Félix y pensar en cómo sus palabras podrían afectarle.

Era un idiota.

8 de la noche y Félix aún no llegaba a casa, a
este punto pensaba que quizás el rubio no quería
venir, tal vez se quedaría a dormir nuevamente con la pareja y el tendría que pasar otro día solo, viendo Netflix y alimentándose de comida rápida porqueestaba tan desanimado que ni siquiera quería cocinarse algo decente y nutritivo.

Estaba mal y lo sabía, pero no tenía ganas de
absolutamente nada, a este punto solo deseaba
tener a Félix a su lado, la casa se sentía tan
silenciosa y monótona sin el.

¿estará bien? ¿seguirá enojado? Esas preguntas
rondaban por su cabeza frecuentemente durante
todo el día, desde que despertó ni siquiera ha
encendido su celular, no quería recibir mensajes de nadie.

Unos golpes en la puerta resonaron por todo
hogar haciendo bufar molesto al mayor, no tenía
intenciones de abrir, pero la persona al otro lado
insistía tanto que terminó por levantarse descalzo del sofá con el ceño fruncido. Changbin no alcanzó ni a abrir la puerta por completo cuando Félix ya estaba encima de el besándolo, el mayor abrió los ojos en grande porque realmente se esperaba todo tipo de cosa excepto esto.

Definitivamente lo tomó por sorpresa pero eso no le impidió devolver el beso con la misma intensidad, las manos de Félix se paseaban libremente sobre el cabello del mayor, bajando por sus mejillas hasta quedar sobre su cuello donde daba leves caricias, dios, no tenía idea de lo mucho que había extrañado a Changbin hasta que lo vió, la necesidad de besarle y tocarle inmediatamente lo invadieron. El bajo lo hizo retroceder hasta que la puerta de su hogar fue cerrada y la espalda del menor quedó sobre esta, teniendo el gran cuerpo de su novio encima suyo.

Félix se separó del beso con la respiración agitada, su mirada fija en Changbin que se veía en el mismo estado que el—Te extrañé tanto— susurró entrecortada mente el mayor, haciendo que Félix muestre su preciosa sonrisa al punto en que sus hoyuelos se marcaban en sus mejillas, se abrazó a los hombros de su novio como si su vida dependiera de ello mientras ocultaba su rostro en su hombro.

—Lo siento, en verdad lo siento tanto—Murmuró el menor en voz baja, Changbin solo pudo sonreír mientras acariciaba su espalda, a este punto había olvidado completamente la pelea, sinceramente ya no le importaba hablar para ver quien tenía razón, solo quería estar junto a su novio y llenarlo de caricias mientras le decía lo mucho que lo había extrañado—. Estaba un poco obsesionado con el tema, cuando me dijiste que no estabas del todo de acuerdo yo...yo solo me sentí muy mal, creí que no me amabas lo suficiente—Changbin lo apretó más entre sus brazos al escuchar la voz entrecortada de Félix, los sollozos del menor se hicieron presentes haciendo sentir triste al más bajo, odiaba tanto escuchar a su novio llorando, especialmente si era por su causa.

—Escúchame bien Félix. Te amo, y no quiero que pienses que no deseo formar una familia contigo—Habló el mayor, separándose un poco del abrazo para poder tomar el rostro del menor entre sus grandes y suaves manos, sus labios dejaban cálidos besos sobre las mejillas de Félix, intentando borrar todo rastro de lágrimas—. Quiero que tengamos un buen futuro para dárselo a nuestro hijo, pero para asegurarlo necesitamos esforzarnos mucho y dejar que las cosas vayan a su debido tiempo, sin prisas—Félix volvió a llorar por lo bonito que había sonado eso, amaba tanto a Changbin que literalmente no podía imaginar una vida sin el, pero ahora era simplemente increíble imaginarse un futuro donde iban a tener otro ser al cual podrían depositar todo su amor y cariño.

—Te amo muchísimo Seo Changbin—Murmuró el rubio amorosamente, el mayor no pudo evitar sonreír al escuchar la forma en la que era llamado, sus manos abandonaron las mejillas del menor, descendiendo lentamente hasta quedarse en sus caderas, las cuales sujetó con fuerza para juntarlo más a su cuerpo, haciendo reír levemente a Félix.

—Y yo a tí, Lee Yongbok—Susurró Changbin sobre los labios contrarios antes de fundirse en estos, extrañaba tanto a Félix que en definitiva no lo dejaría tranquilo durante toda la noche.