02. SeHun

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—¿JunMyeon? —lo empujó y siguió caminando. Tal vez era de cobardes, pero esperaba que no lo siguiera, total, años atrás no lo detuvo, ¿por qué ahora sería diferente?

Su corazón latía con violencia, ¿por qué de entre todos los lugares tenía que venirse a encontrar al sujeto S justo en medio de una fiesta? Apretó los puños, ni siquiera conocía al festejado, pero tenía a quién echarle la culpa.

—Su culpa por cumplir años e invitar a JiSoo.

Vio la puerta y una sensación de alivio se fue expandiendo por su cuerpo, debía salir de ahí con urgencia, no podía permitir que SeHun descubriera que todavía tenía sentimientos por él, pero la felicidad no duró mucho, el agarre en su muñeca detuvo su caminata a la libertad.

—JunMyeon —Oh, Dios, no. ¿Fingir que era otro pobre desgraciado funcionaría para él?

—Me confundes con otro —respondió sin mirarlo e intentó seguir avanzando, pero no pudo hacerlo porque el chico se colocó frente a él.

—Jamás te confundiría.

Ambos se miraron por un corto tiempo, entonces JunMyeon se soltó y suspiró resignado. Los dos caminaron alejándose de las personas que bailaban. Pero la música no fue suficiente para callar el grito de la chica que segundos atrás había insultado. Genial.

—¡SeHun, viniste! —YeMin se acercó a abrazarlo, JunMyeon imaginó una sanguijuela, de esas que te joden toda la sangre hasta matarte, así se veía ella pegada a SeHun.

—YeMin, ahora no —la apartó. Dios, ¡la apartó! JunMyeon no podía creerlo, aunque el hecho de que estuvieran los dos en esa fiesta provocaba gran desilusión.

—Yo vine con alguien, los dejo solos —mintió a medias, YiFan serviría de mucho ahora.

Si YeMin y SeHun estaban en la misma fiesta, probablemente ella lo había invitado, ¿por qué le sorprendía? Ellos dos debían seguir juntos. Estúpido SeHun, su último consejo antes de dejarlo en paz fue precisamente alejarse de esa bruja, pero fue tan tonto para no hacerle caso. Si años después los encontraba casados, no tenía por qué sorprenderse.

Fue un alivio alejarse de la fiesta. Pudo ver el auto de JiSoo estacionado, pero JunMyeon siguió por la calle esperando encontrar algún taxi que lo llevara a casa. Vaya fiesta, tener que encontrarse a SeHun ahí, ¿qué clase de castigo era ese? Bien, lo admitía, no lo había olvidado, pero claramente se sentía mucho mejor y ya no dolía tanto, pero volverlo a ver había sido demasiado para su ritmo cardiaco.

—¿Podría esto ser peor?

—¡Espera!

¿Cómo? ¿por qué lo seguía? Con temor giró su cuerpo encontrándose con un SeHun corriendo hacia él. Tragó saliva, joder, ¿por qué hacía eso? ¿por qué lo había buscado?, ¿dónde había dejado a YeMin?

—¿Qué haces?

—Tenemos que hablar.

—Creo recordar que dejaste las cosas bien claras hace cuatro años. Yo ya no quiero hablar más, deja las cosas así —¿Acaso SeHun no podía ver que era difícil para él seguir con eso? Tenía que llegar a la seguridad de su habitación y tranquilizarse.

—Jamás debí dejar que el trauma que tenía de niño afectara la amistad que teníamos. Tuvo que pasar un año para darme cuenta de mi error. Estuve yendo con un doctor, el cual me hizo superar mi fobia.

—Bien por ti.

¿Qué? ¿eso quería decir que ya no lo repudiaba? Aunque tenía curiosidad no quiso preguntarle nada, necesitaba que SeHun lo dejara en paz, le había costado mucho seguir con su vida, no quería que la desequilibrara una vez más.

Boomerang | SeHoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora