No volví a saber nada de Ray en toda la semana.
Supuse que estaría ocupado con la mudanza o algo así (investigué un poco, no estube preguntandole a todos los que pude en el insti ni nada por el estilo ¿vale? Bueno, puede que solo a aquellos con los que me hablaba...).
Estaba pensando en si llamarle o no cuando mi teléfono empezó a sonar.
Sarah.
-¿Si?
-Tía, tienes que ver esto. Ven a mi casa, AHORA.
Y colgó.
Espero que esta vez sea algo importante, no como cuando su prima venía y ella me llamaba para marginarla porque no quería que las vieran juntas, o como cuando May estaba de cumpleaños y Sarah me llevó con ella a la habitación de la cumpleañera para tirar toda su ropa interior por la ventana.
Cogí el móvil y algo de dinero y caminé hasta su casa. Timbré y casi al instante Sarah abrió la puerta, me agarró y tiró de mi hacia el salón.
-¿Te acuerdas del niño de gafas con el que te habías "casado" cuando éramos pequeñas? ¿El que supuestamente se había mudado a Berlín?
-¿El rubio?
-Sí.
-Claro, ¿por que lo...?
Y lo vi, sentado en el sofá individual de la sala de Sarah. Me vio y se le iluminó la cara, se levantó y vino hacia mí.
-¿Kayla?
-¿Gary?
Su cara se iluminó más aún.
Este chico parece una bombilla humana...
Me abrazó, me agarró por los hombros, se alejó un poco y me miró aún brillando.
-Cuanto has cambiado estos años...
-Y... Tú...
Y era cierto que ambos habíamos cambiado pero él... Él... En una sola palabra, buff...
Pasó de ser un niño rollizo y con muchas pecas a un chaval fornido y bastante sexi.
Me sorprende que aún este aquí y no en la cama de Sarah.
La chica de las mechas moradas se decidió a hablar.
-Bueno, hay tantas cosas que tenemos que contarnos nosotros 3...
ESTÁS LEYENDO
Sensaciones apagadas
Romance¿Por qué todo me sale mal? Kayla es una adolescente de 15 años con un brillante futuro por delante; sus notas en clase son de las más altas, sus padres y amigos la adoran e incluso va a clases de piano. La chica perfecta pensaremos, pero hay algo qu...