CAPÍTULO 25

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Jack alzó su mano y arrojó una onda telequinética contra el robusto capullo que retenía a Gwen, el impacto fracturó las escamas y gruesas raíces que lo componían y la dejó libre. Ultra avanzó a paso pesado y se lanzó contra ellos, elevó su gran puño y azotó contra el suelo, Luke saltó para eludir la expansiva, mientras que Jack se apartó del suelo y trató de volar junto con ella, sin embargo el titán alargó su mano, atrapó su tobillo, y en un segundo lo azotó de lado a lado contra la estructura, causando violentas sacudidas y desestabilizando así toda la superficie.

Luke le disparó una ráfaga de plasma, consiguiendo captar prontamente su atención, soltó a Jack y como si de una bestia se tratara, avanzó imponente hasta el Alterado y empezó a atacarlo.

—¡Jack! —vociferó Gwen con premura. Pateó con fuerza el grueso cristal resquebrajado del capullo y finalmente consiguió salir por completo, pegó un salto y aterrizó sobre la superficie, corrió hasta él y tomó su cara—. Jack.

Sangre brotaba de su boca y nariz, estaba herido y la afección escamosa en su piel ya había alcanzado una parte de su rostro, pintándola de un pálido y enfermizo gris que contrastaba gracias a aquellas grietas purpuras que brillaban cual si hubiese fuego corriendo en todo su ser.

—Gwen —acarició su rostro, tosió con fuerza y lanzó algo de sangre.

—Tranquilo, saldremos de aquí.

—¡Chicos, una mano por acá! —clamó Luke, en eso Ultra lo golpeó y lo hizo salir volando como una bala a través de múltiples sectores de aquella fortaleza oscura.

Jack apretó los dientes y se puso de pie, tomando aire y valor para el siguiente encuentro que tendría contra aquel genocida galáctico.

—Vete, Gwen, sal de aquí antes de que Barry detone la bomba.

—Ni hablar —tomó su mano y él volteo a verla—. No te voy a abandonar.

Sonrió. Buscó entre su traje y extrajo el dispositivo que otrora le había entregado Evan.

—En ese caso —se lo entregó y ella pareció sorprenderse—. Evan me dijo que te lo diera.

Rápidamente tomó aquel curioso dispositivo, lo accionó dejando su dedo en un lector digital y lo colocó sobre su pecho. Entonces una capa metálica se dispersó con toda velocidad en todo su cuerpo, envolviéndola en un manto que posteriormente se transformó en una apantallante armadura de colores blancos y dorados que contrastaban con majestuosidad a la renovada heroína. Era como ver una versión femenina y mucho más estilizada del traje de Exo-Knight.

Ultra se plasmó en el lugar. Jack se puso en guardia y Gwen se levantó del suelo y empezó a volar con la majestuosidad de un ángel de acero.

—Lindo traje —profirió el titán con una sonrisa—. Espero y no te importe llenarlo de sangre.

Corrió entonces hacia ellos. Jack alzó sus manos y derrumbó el techo sobre él, Gwen maniobró sobre su periferia mientras que le disparaba con unos cañones de laser que portaba en sus muñecas. Luego del ataque, acabó sepultado en un manto de escombros que se solidificó cual si fuese una capa, pero esto no lo detuvo, se levantó y con un rugido desplegó una onda expansiva. Jack la resistió, mientras que Gwen era lanzada unos pocos metros lejos, sin embargo mantuvo la estabilidad y desplegó una ráfaga de misiles pequeños que impactaron contra el enorme ser.

Los estallidos le cubrieron y mantuvieron a raya como si se tratara de un enjambre de insectos voraces. Una vez que se disiparon los estallidos y el humo; levantó su mano y disparó igualmente una centellante descarga de su característica energía purpura.

La Defensora contrarrestó los ataques lo mejor que pudo, pero la energía del invasor era demasiada, acabó perdiendo en el duelo de fuerzas y cayó contra el suelo.

ALTERADOS: Era de SombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora