Capitulo 3°

0 0 0
                                    

Que idiota, encerio cree que esa niña miedosa va a sobrevivir aquí, no sabe ni que hacer- no me encuentro de buen humor, solo me dirijo a mi casa caminando muy molesta.

...

Entre por la puerta y veo a mi mamá llorar sentada en un sillón que se encuentra en la sala principal.

¿Mamá?- le hablo, ella rápida mente se para y me abraza muy fuerte- ¡Mamá!, ¿que?, ¿que tienes?, ¿Te encuentras bien?- la miro con una expresión de confución.

Sara Martínez Brown- al escuchar mi nombre completo supe que está sería una charla muy muy larga- ¿Se puede saber en dónde estabas?, Estube muy preocupada por ti, no sabía que hacer, ni dónde buscarte,  ¿porque te escapas tan temprano por la mañana?, ¿Por no me dijiste?, ¿No sabes lo...

Mamá, que dramática, solo salí aque me pegará el aire fresco, ni siquiera me tarde una hora, no se porque te pones haci- tenía una cara de disgusto, espere que mi mamá estubiera llorando por algo más fuerte, no por esto.

Cuando seas madre lo entenderas- me dijo, en ese momento la aparte de mi.

Bien, basta de abrazos, estoy hambrienta- mi madre me agarró de la muñeca y me jala al comedor, hay me pide que me siente y me da de comer.

El desayuno es una ensalada de frutas y verduras crudas, aparte secas, algo muy notorio en mi madre es que quiera cuidar de mi salud- Ensalada de frutas y verduras secas- Típico de usted madre- realmente quiero a mi mamá pero nunca me a gustado expresar mis sentimientos negativos desde que murió Lara, ya no me gusta socializar, no importa de quién se trata, ella era todo para mí.

...

Eeee... Cielo, podrías tratar de dormirte temprano hoy, no quiero levantarte mañana para que vayas a la escuela.

Mierda... Si es cierto, mañana inician mis clases- una mueca de fastidio se forma en mi cara- Lo intentaré- en ese momento se me ocurre una idea- mamá voy a intentar dormir, por favor, no me moleste.

Subo las escaleras y camino hasta mi cuarto, entro en este y cierro la puerta con seguro, me dirijo hacia el armario, agarró unos pantalones negros un poco holgados, tienen unas decoraciones con cadena, cuentas y demás, también una sudadera con gorra, unos guantes que cubrían mis dedos, un cubrebocas y unos zapatos, toda mi ropa era negra, lo metí todo en una mochila y salí por la ventana.

Afortunadamente mi casa era de dos pisos, desafortunadamente mi cuarto estaba en el segundo, pero como tenía un buen estado físico, gracias a mi madre por cuidar mi alimentación y a mi padre por meterme a diferentes deportes, podía brincar desde mi balcón hacía abajo si sufrir daño alguno y eso hice.

Corrí hasta llegar al edificio abandonado de mi grupo, ya no se encontraba nadie más, era perfecto, me vestí en los restos que quedaban de los baños, salí de hay como toda una criminal, ese edificio era de cinco pisos, en el último piso guardamos todas la armas, subí y agarré una Navaja de mariposa tenía un diseño colorido, muy diferente a las demás armas, esa navaja es mi favorita, con una pistola Walther P99 de color negro junto con un mechero y un litro de gasolina en una botella de vidrio para que se viera menos sospechoso.

Corrí hasta llegar al edificio abandonado de mi grupo, ya no se encontraba nadie más, era perfecto, me vestí en los restos que quedaban de los baños, salí de hay como toda una criminal, ese edificio era de cinco pisos, en el último piso guardamos ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Salí de el edificio y me adentre en una zona desconocida muy circulada, di uno rondines hasta que decí a quien asaltar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Salí de el edificio y me adentre en una zona desconocida muy circulada, di uno rondines hasta que decí a quien asaltar. Era un hombre de unos cuarenta a cincuenta años, se veía que era un hombre de negocios, estaba hablando por teléfono en un restaurante, le exija de una forma muy grosera a las meseras, me subía a uno de los tejados de un edificio pequeño, donde tenía una vista perfecta de aquel hombre, hasta que ví que ya se iba a ir, decidí ejecutar mi plan.

______________________________________

Mi despedidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora