VOLVIENDO A LA NIÑEZ

capitulo 1

En un día soleado, en un templo "sagrado" junto con un inmenso árbol casi como el goshishimboku...

-¡Whaaa! -grito una voz masculina

-¡Inuyasha!

Inuyasha se encontraba luchando contra el brazo del enemigo cual lo tenia agarrado del pescuezo. Miroku se encontraba desmayado contra una roca. Sango se encontraba recargada en hiraikotsu por un fuerte golpe que recibió en el estómago. Aome tenia a shippo en brazos, ambos mirando con preocupación a Inuyasha, ¿Cómo sucedió esto? Bueno...

*Flash back*

Nuestros protagonistas se encontraban en un dia común en busca de los fragmentos del shikon, nada raro sucedía, cuando...

-lo has oído -susurro una chica a otra

-se dice que es en el templo mitate

-nadie de nuestros valientes soldados a regresado vivo -dijo con unas lagrimas queriendo salir

Al percatarse de esto shippo solo suspiro

-hay vamos de nuevo -dijo cansado el pequeño kitsune

Miroku se acerco a los jóvenes que se encontraban hablando

-sucede algo señoritas

-¡Ho!, ¡Un bonzo!, ¡Alabado sea kami-sama! -grito con felicidad una chica

-que sucede, ¿Problemas con yokais? -pregunto aome

-hoshi -sama -dijo sango con tono amenazador -lo mejor será que se aleje de las chicas, no queremos que lo confundan con otro yokai, como con chokioukai ¿Verdad?

-perdón sango

-bueno ¿Qué sucede? -pregunto la miko futurista

-hace mucho tiempo -comenzó una anciana que se encontraba con las jóvenes -cerca de la aldea hay un templo, el cual conserva el árbol del rejuvenecimiento o mejor conocido como el árbol de la juventud. El árbol era puro y limpio. Pero hace dos meses un demonio llamado fushinko, mato a los monjes de ese templo, causando que el árbol sé volviera impuro, pronto comenzó a darle poderes demoniacos, gracias al árbol, ese yokai se a vuelto mas fuerte, ya que quien lo toca roba su energía vital, fushinko toma esa energía para complementar su fuerza. A pesar de mandar a todos nuestros guerreros mas fuertes jamás han vuelto con vida -explico con cierta tristeza

-no se preocupen jóvenes damas, capturamos al yokai y purificaremos el árbol para que regrese a su forma normal. Por otro lado, ¿no les gustaría tener...? -fue golpeado en la cabeza por el hiraikotvayasu 

-bueno acabemos con esto para regresar en la búsqueda de naraku y los fragmentos -dijo cansado de la escena inuyasha 

las mujeres indicaron donde quedaba el dichoso templo y partieron hacia a ya. Al llegar no había nadie, subieron unas enormes escaleras llegando por fin. se sentía una aura maligna en todo el lugar pero con una pisca de pureza, probablemente del árbol que aun conserva pureza 

¿Qué tenemos aquí? -dijo una voz tosca 

-¿tu eres ese tal fushinko? -pregunto inuyasha desenvainado a tessaiga 

-oh, vaya, vaya, si solo son tres humanos, dos yokais y un hanyo. Tal vez me sirvan para aumentar mi fuerza 

¡no me jodas!, ¡muéstrate para tener un encuentro cara a cara! -ordeno el oji ambar 

-inuyasha cálmate -dijo miroku -no sabemos a lo que nos enfrentamos 

-¡silencio!, ¡quiero acabar esto hoy no mañana!