One Shots [Bnha]

Secretos

[Tamaki y Tú]

El frío de la noche me recorría de pies a cabeza mientras salía del cuartel de la liga de villanos, caminaba entre callejones sin prestarle atención a mi alrededor, la luna estaba en su punto más alto, se veía perfecta... Me daban ganas de apagarla a cuchillasos.

Las cosas nos estaban llendo bien últimamente para nosotros lo cual provocaba un pésimo humor en Tomura, uno peor que el que ya acostumbraba a tener, y encima dirigía la mayoría de sus malos tratos hacia mi, como si yo tuviese la culpa de que sus planes fuesen una mierda.

Estaba tan inmersa en mis propios pensamientos que no me percaté de que mi cuerpo siguió moviéndose instintivamente hasta haber llegado a mi destino.

Y ahí estaba él, como siempre llegando 20 minutos antes de la hora acordada, y luciendo tan hermoso como de costumbre. Me acerqué a él sigilosamente hasta llegar a abrazarlo por la espalda, provocando un pequeño brinco por su parte.

- ¿Me extrañaste púlpito? - Lo abrace con un poco más de fuerza sintiendo como su olor inundaba por completo mis fosas nasales, jamás me cansaría de el mismo.

- Hola pequeña. - Habló en un tono suave y bajo, mientras colocaba sus manos sobre las mías antes de girarse y quedar de frente a mí. - Te extrañe como no tienes idea.

Y sin retrasarlo más juntamos nuestros labios en un tierno beso, antes de conocer a Tamaki yo ni siquiera era capaz de besar a alguien fuera del sexo, pero el era capaz de sacar el mejor lado de mi, el veía una mínima gota de luz en mi interior.

Habían pasado meses desde nuestro último encuentro debido a que ambos habíamos estado demasiado ocupados en misiones, y por si se lo preguntaban si, mi chico estaba al tanto de todo lo que hacía, y si, nos habíamos convertido en el típico romance prohibido del héroe y la villana, éramos tan clichés que a veces me daba ganas de vomitar.

Luego de unos minutos nos vimos obligados a romper el beso por falta de oxígeno, y mi mano subió para acariciar lentamente su mejilla mientras en nuestros rostros se dibujaban dos sonrisas.

Joder enserio lo había extrañado demasiado.

- ¿Vamos a tú apartamento?¿O prefieres emplear el exibisionismo de nuevo? - Hablé mientras comenzábamos a caminar aún sin un rumbo fijo, y pude notar de reojo como sus mejillas tomaban un ligero tono carmesí.

- Preferiría ir a mi apartamento... Y que tú te olvidarás de eso.- Bajó la mirada a la vez que entrelazaba nuestras manos, me era imposible olvidar aquel día en que nos vimos por segunda vez y siendo presos de la tensión sexual terminamos haciéndolo en un callejón.

- Admite que tú tampoco lo olvidas, creo que incluso te gustaría volver a hacerlo.- Me reí por lo bajo notando como su sonrojo aumentaba.- Eres muy fácil de molestar.

Seguimos caminando hacia su apartamento en silencio, yo volví a sumirme en mis pensamientos, a veces cuando me encontraba con él solía imaginarme un mundo diferente, en el que podíamos amarnos libremente y a plena luz del día, pero nunca pasaban de eso, de simples escenarios imaginarios.

- Hey, tierra llamando a T/N. - Una mano paso por el frente de mi rostro trayendome de vuelta a la realidad. - Estabas un poco ida, ¿Estas bien?¿Te sientes mal?¿Quieres que te lleve a tu casa?