Soplará, soplará y todas las esperanzas va a derribar.
Elena Smith
—Está muerta.
—Lo sé, pero aún podemos hacer algo —musite aún perpleja.
—¿Qué supones que hagamos, Elena? —continuo en un tono sarcástico mezclado con nerviosismo—. Está muerta, Elena, tienes que salir de aquí y ponerte a salvo en la estación.
Nuestros ojos colisionaron buscando entender lo que estaba pasando pero, todo era confuso, irracional y aterrador. No solo por las últimas palabras que dijo la joven, sino porque era imposible que alguien estuviera rondando por este lugar lleno de policías y caninos.
Esto solo confirma mis teorías. Lo que sea que está rondando en este bosque no es humano.
—Vamos, hay que salir de aquí, es peligro —su mano tomó mi brazo ayudándome a levantarme, mientras miraba en todas direcciones—. Esto no va a terminar bien si seguimos aquí.
Arthur tenía razón. Lo que sea que anduviera por aquí nos estaba acechando, jugando con nosotros y teníamos que irnos antes de acabar muertos o transtornados.
Estábamos prácticamente corriendo a través del denso bosque, sentía que nos estaban vigilando, mi corazón estaba al borde de un colapso y mi instinto de supervivencia tomaba gran parte de mis pensamientos en este momento.
Todo de alguna manera estaba yendo más lento, me sentía acorralada presa del pánico y la adrenalina que mi cuerpo producía. No sabía cómo pero eso estaba detrás de nosotros, los segundos se volvieron invaluables y los pequeños detalles en oportunidades únicas para sobrevivir.
Parecía que corríamos en círculos, solo había bosque por donde miráramos. Me estaba empezando a faltar el aire necesitaba parar pero, eso era suicidio seguro, me ardía el pecho y si seguía así iba a colapsar en cualquier momento.
—¡Arthur detente! —grite exhausta, mirándolo.
—¿Estas bien? —expulso agitado. Quería decirle que si pero, este no era el momento para mentir—. Tenemos que salir de este maldito lugar, reportar el cuerpo y buscar al demente que hizo esto. Somos blanco fácil aquí.
Estaba en lo correcto e iba a reanudar el paso pero, una risa atrás de nosotros nos hizo pararnos en seco.
Nos acorralo, nos convertimos en la diversión de esa cosa.
—No debería estar aquí capitán y usted mucho menos usted sacerdotisa, este bosque es peligroso—añadió aquel demonio.
Me gire para ver aquel ente pero no había nadie allí, la runa de mi collar comenzó arder al punto de quemarme la piel haciendo que soltara un quejido.
Todo tuvo sentido en eso momento y estuve a punto de responderle...
Cuando Arthur cayó al suelo.
Un escalofrió me recorrió el cuerpo en ese instante, sentí como una mano se aferraba a mi cuello con potencia. Un segundo después, mis pies despegaron del suelo y empezó a faltarme el aire, tanto que sentí que iba a matarme.
Trate de lucha pero era inútil, la mano me comprimió mas, esta deleitándose con mi miedo queriendo así entrar a mi mente. Sentí como intentaba quitarme el collar pero era inútil, la magia que lo protege es indestructible, intenta de nuevo obteniendo el mismo resultado.
—Debe alejarse cortesana, no es un buen lugar para ofrecer sus servicios—susurro el demonio.
Cada neurona dentro de mí se congelo, dejándome sin posibilidad de atacar y a merced de una bestia que solo quería matar. Estaba entre el delgado hilo de la vida y la muerte con mis ojos divagando en la oscuridad que se cierne delante de mí. A pesar de ya no sentir fuerza algo aparto aquella mano de mi cuello con tanta fuerza que caí, empecé agarrar grandes cantidades de aire para llenar mis pulmones teniendo miedo de que eso regresara a terminar el trabajo.
Busque a Arthur con la mirada y lo halle tumbado en el suelo luchando contra una espesura negra, comencé a arrastrarme para poder ayudarlo cuando un sonido bestial y aterrador se oyó de la nada, mi corazón se estaba hundiendo en un mar de miedo.
Sentí un sabor salado en mi boca. El grito de Arthur fue la gota que derramo las mínimas esperanzas que tenía y supe que no íbamos a salir vivos de esto. Lo estaba torturando no solo físicamente también a nivel mental y probablemente seguiría así por horas.
Necesito salvarlo, necesito que el viva... Yo lo necesito.
Un grito broto desde lo más profundo de mi garganta activando el poder de runa, su explosión de energía ligada con la mía expulso a la sombra lejos de él.
Volví arrastrarme para llegar a él y mientras lo hacía veía los cortes, las quemaduras y la sangre que brotaba de sus brazos. Con el corazón en la garganta llegue a donde se encontraba tirado, tenía sangre brotando de la nariz en cantidades, su cara estaba toda golpeada con cortes en los pómulos y su cuerpo estaba temblando.
Mis manos se posan en su rostro liberando el llanto que tenía acumulado, su estado es fatal y no reacciona. Intento moverlo pero no reacciona, acerco mi cabeza a su pecho para oír su corazón pero no logro nada.
—Arthur despierta por favor—le ruego.
Lo abrazo queriendo salvarlo, queriendo nunca haber acabo aquel beso que me recordó lo mucho que lo extrañe cuando deje de hablarle para comenzar el entrenamiento para ser una iluminada.
—Por favor Arthur vuelve a odiarme—musitó llorando.
Ese monstruo a conseguido fragmentarme, me siento vacía y perdida en este bosque sin poder seguir peleando. Mi cuerpo está entumecido y no puedo puedo mover las piernas, mis fuerzas están en un conteo regresivo y por primera vez en años el mal logro derribarme.
Todo a mi alrededor comienza a verse borroso, mis manos se aferran al cuerpo de Arthur, el desespero y la tristeza atacan aferrándose a mi cabeza y los recuerdo duelen tanto que terminó mareandome. Comienzo y a ver puntos blancos y mi cuerpo esta tan preso del dolor y el temor que temo desfallecer.
Mis labios se sienten secos, todo se vuelve negro y casi no puedo abrir los ojos a pesar de mis intentos.
—Duerma bien cortesana, necesitará energía para ayudar recomponer a su dueño mañana—musitan en mi oído.
No puedo mantenerme mas despierta y empiezo a perder y antes de que todo se vuelva negro divisó unos ojos tan azules como el mar cristalino.
<<Arthur>>
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AXEL
Mystery / ThrillerAsesinatos en el pueblo de Salem atraerán la atención de muchos, el despertar de un ser maldito y maligno atraerá el principio del caos. Una leyenda es recordada, una maldición es activada y un misterio necesita ser resuelto. Bienvenidos hermanos...