Más que amigos || Draco Malfoy

Capítulo 59

─Ron, cállate

Ron seguía rondando, haciendo sonidos de cerdo

─Ron por favor, intento dormir- di media vuelta y me tapé los oídos con la almohada, pero fue imposible

Solté un gruñido y estampé mi almohada en su cara

─¡Oye!- se quejó- ¿Se puede saber qué haces?

─Despertarte, ¿no ves?- respondo- Roncas mucho

─Pues te aguantas y no haber invadido mi habitación. Ahora si me permites, procedo a soñar de nuevo

Él volvió a cerrar los ojos y de la nada empezó a roncar otra vez.

Rodé los ojos y salí de la habitación para dormir en el sofá.

─¿Que haces aquí? Solo son las cinco y media de la mañana- preguntó George cuando me senté en el sofá

─Debería preguntarte lo mismo- dije

─Simplemente no podía dormir- gesticuló sentándose a mi vera

─Ya somos dos... Con los ronquidos de Ron es imposible

─Te quejas de Ron, pero eso es porque no has escuchado a Fred

Ambos reímos en bajo, y quedamos en un silencio acogedor, hasta que George lo rompió

─¿Lista para ir por la tarde a ver a Black y Brown?

─No lo sé- suspiré- Estoy demasiado nerviosa, Georgie

El pelirrojo pasa un brazo por mis hombros para rodearme y darme un beso en la frente

─Todo irá bien, T/N. Por fin os veréis y podrás contarle todo lo que te plazca. Tu vida desde pequeña, tu estancia en Hogwarts, tu relación con Wood, tu súper beso con Malfoy...

─No voy a contar eso. Seguramente me mate por lo de Draco- digo

─Lo entiendo- ríe- yo también lo hubiera hecho

─Idiota- ruedo los ojos y me acurruca más hacia él, hasta finalmente quedarnos dormidos

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Respiré profundo y me lancé en los brazos mi padrino

─Por fin- dijo entusiasmado

Varias lágrimas de felicidad recorrieron mis mejillas. Me aparté, y él me las secó con su dedo pulgar

─No llores, pequeña. Ahora estamos por fin más unidos que nunca

─No sabes cuánto te he extrañado- dije sonriendo

─¿Y a mí no?- di media vuelta, y atrás se encontraba Sirius

─¡Claro que a tí también!- lo abracé

Todos estuvimos cenando alegremente. La mayor parte de la conversación fue sobre la idea de que los gemelos tenían pensado abrir una tienda de artículos de broma

─Ya sabéis que tenéis todo mi apoyo- sonreí mientras ayudaba a recoger los platos de la mesa

Nada más terminar, Jack y yo nos quedamos solos charlando

─Siento mucho lo de tu amigo, T/N. Debió de ser valiente

─Si lo fue- respondí con voz temblorosa- Cedric ha sido muy luchador

Tragué saliva duramente. Muchos recuerdos con Ced se me pasaron por la cabeza. Desde el primer día que nos conocimos hasta el último día en el que pude hablarle y abrazarle.

─Y... ¿tienes novio?- yo asentí cuando el frunció el ceño- No será Malfoy, ¿verdad?

─No lo es- reí- Él es mi mejor amigo, supongo... Ahora sigo estando con Oliver

─Wood, ¿cierto? El jugador de Quidditch del...

─del Puddlemere United. Sí- interrumpí

Jack hizo un gesto con la cabeza de reconocimiento y aceptación

─Mientras no te haga daño, seré bueno con él

Fue inevitable soltar una risa. Ahora mi padrino actuará de padre.

─Oye... ¿Me podrías contar algo sobre... mamá?- pregunté dudosa

─Por supuesto

Ambos nos sentamos cómodamente en el sofá, frente a frente.

─Vanessa... era la hermana mayor, así que eso implicaba que estuviera todos los días al tanto de lo que yo hacía y estaba cuidándome constantemente. Aunque sólo era dos año mayor que yo, era muy atenta.
No entiendo cómo es que se enamoró y casó con tu padre... Sin ofender...- levantó una mano en forma de disculpa- Mis amigos y yo nunca nos llevamos muy bien con él, pero tu madre era muy compasiva.
Eres muy parecida a ella, ¿sabías? Igual de valiente y atenta. Ya entiendo porqué eres una gran y estupenda Gryffindor

Pude ver cómo sus ojos se cristalizaban al hablar de ella, aunque brillaban como nunca.

─Creo que es hora de irnos a dormir, T/N. Buenas noches

Se levantó del sofá, me dio un beso en la frente y se fue de la sala, dejándome sola en compañía de mis pensamientos.

Lo hubiera dado todo por haber conocido a mi madre.