capítulo 14

906 111 7
                                        

Pablo -susurra en el beso antes de alejarse, lo ve y sonríe- eres tan especial

-sonríe- Joaco, el especial acá eres tú -le acaricia la mejilla con delicadeza- aparentas ser frágil y no lo eres, eres capaz de derribar la muralla china si te lo propones

-ríe- no exageres -ve al rededor de él- oh! No me había dado cuenta que estábamos en mi departamento

-ve al rededor de él- ¿En qué edificio vives?

-apunta el que está detrás del chico- en este

-se voltea- está lindo ¿Cuál es tu departamento?

-le sonríe- el 308 ¿Quieres subir?

-niega- tu amigo debe estar esperándote y pues no creo que le agrade que yo aparezca

-rie negando- Pero si yo también vivo ahí y si él puede llevar a personas, yo también

Pero ¿Cómo me presentarias? -niega- mejor no Joaco -le da un beso en la frente- de verdad no quiero que te sientas presionado por nada y si me haces pasar a tu casa, ya habremos pasado otro límite y no quiero hacerte sentir mal

-suspira- Pablo -lo ve y asiente- está bien, esto que tenemos no tiene un nombre y dudo que tenga uno en algún tiempo, yo vengo saliendo de una relación y pues no quiero nada serio aún

-asiente- lo sé y por eso no quiero pasar a tu casa, como te dije sería pasar un límite y la incomodidad sería mayor para todos -le vuelve a besar la frente- pero si gustas mañana te paso a buscar

-sonríe- no es mala idea, pero mejor nos vemos en el trabajo -se aleja y le sonríe- nos vemos y descansa -abre el portón del edificio-

Descansa Joaco -le sonríe y espera que el menor entre al edificio, ya cuando está dentro se retira-

Igual tú -se despide con la mano y entra al edificio, sube al ascensor y presiona su piso para luego abrir la puerta de si departamento y entra- Tahi ya llegué -ve al mayor en el balcón- ¿Emilio? - se acerca- ¿Estás bien?

-al ver qué el menor estaba entrando al edificio, se salió de la ventana y caminó hacia él balcón, al oír que el menor entró se limpió rápidamente las lágrimas y lo vió al sentirlo cerca- hola Tahi, si todo bien

-deja su mochila en el balcón y le toma el rostro- estás llorando -lo ve preocupado- ¿Seguro estás bien?

-asiente- si Joaquín estoy bien, en la mesa está la cena, yo ahora me voy a dormir estoy cansado

-le suelta el rostro- debiste haber tenido acción hoy si estás tan cansado -le sonríe-

Así es, un chico que era insasiable, ya sabes que yo cumplo todas las fantasías de las personas -entra a la sala-

-recoge su mochila y entra junto al mayor- Eso es bueno, deberías cobrar y así te pagarian por lo que te gusta hacer -ríe-

No soy un prostituto Joaquín -le mira sonriendo- bueno me voy a duchar y me acuesto, descansa moco

Igual tú -ve como el mayor se mete a su cuarto y él va a la cocina a servirse la cena, come en tranquilidad-

-al entrar al cuarto, se enoja con él mismo por haberle dicho al menor que había tenido a un chico, siendo que toda la tarde se la pasó creando una canción con la que se le declararía al menor, entró a al ducha y pensó que lo mejor era no hacerlo, ya que como había visto al menor que estaba al parecer en algo con su compañero de trabajo y cuando le dijo lo del chico, Joaquín no mostró ni un rasgo de molestia, terminó de bañarse y se acostó-

A la mañana siguiente el primero en levantarse fue Emilio, preparó el café y picó fruta con avena para el desayuno. Joaquín apareció a lo minutos después ya bañado y listo para ir al trabajo.

Hola Emilio -saluda animado al mayor y se sienta a desayunar-

Hola Tahi -dice sin emoción en su voz-

-suspira- ¿Estás bien? Te conozco Emilio Osorio Marcos

-lo ve y asiente- si, estoy bien

Pues avísale a tu cara que lo estás, por qué tienes cara de querer matar a alguien -le suena el teléfono con un mensaje, se deja la cuchara en la boca- mmm -se quita la cuchara- es un mensaje de Pablo

¿Yo querer matar a alguien? -al ver cómo se coloca el menor ante el mensaje de su compañero, recuerda lo que vió la noche anterior- imposible, no quiero matar a nadie

-lo ve después de responder el mensaje- claro, la idea de que quieras matar a alguien es estúpida -ríe-

-le hace una mueca- bueno, me voy a correr y supongo que cuando vuelva ya no estarás, así que adiós -abre la puerta-

Emilio -lo ve- ¿Seguro estás bien?

Si Jaoquín -se coloca los audífonos- estoy muy bien -sale del departamento-

Estás bien... pero bien raro -dice después que el mayor cerró la puerta, terminó de desayunar, lavó los platos y luego se fue a lavar los dientes para irse a su trabajo, se colocó sus audífonos y se emprendió camino a la cafetería-

Emilio por su parte se fue a correr un bosque que había cerca, solo quería despejar su mente y con el ejercicio siempre lo lograba, lo ayudaba a botar todo tipo de estrés y de preocupaciones y era justo lo que necesitaba en este momento, dejó de correr cuando sintió su celular sonar.

📲 ¿Bueno? -responde un poco agitado por el ejercicio-

📱Hola, ¿Hablo con Emilio Osorio? -dice la voz al otro lado del teléfono-

📲 Si, con él ¿Con quién hablo?

📱 Hola, hablas con Carlos Caballero, te llamaba para agendar tu hora para que vengas a hacer la prueba de estudio

📲¿Prueba de estudio? Creo que se equivocó de persona, no conozco a nadie con su nombre y pues tampoco se de qué me está hablando

📱Ok, empecemos de nuevo soy Carlos Caballero de Sony Music México y pues mi hijo Nikolas me hizo llegar un vídeo tuyo cantando y pues nos gustó tu forma de cantar y de como vives la música

📲 Lo voy a matar, se acaba de quedar sin hijo -suspira- lo siento pero de verdad no me interesa

📱 Entiendo que estés molesto, ellos me dijieron que no te gusta mucho la vida pública

📲 ¿Ellos?

📱Si, mi hijo y su amigo Joaquín

📲 ¿Joaquín Bondoni?

📱 Si, él -suspira- mira entiendo que no te guste esta vida pero al menos danos la oportunidad de tener una versión tuya en el estudio y así poder luego que tomes una decisión pero sabiendo cuan valiosa es tu voz

📲 -suspira- está bien, pero iré sin compromiso ¿Para cuándo quieren que valla?

📱 Mañana a las 10 de la mañana ¿Puedes?

📲Si, nos vemos allá entonces, que tenga buen día -cortó la llamada-

📱 Igual tú Emilo, nos vemos

Luego de haber colgado la llamada, guardó su teléfono y empezó a correr de nuevo pero en dirección a la cafetería.

The FuckboyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora