Me levanté temprano por que tengo que ir a trabajar, trabajo en un Starbucks y hoy me toca turno de mañana, me dormí tarde por culpa de Emilio pero ya me da igual, al final se que cambiara en algún momento y eso me hace tener mejor ánimo aunque de repente pienso que no cambiará pero en fin pase lo que pase es su vida y yo decidí venir a vivir con él así que no me quejo.
Hola moco -aparece el mayor con la toalla en la cadera y otra toalla en el cuello secándose el pelo- ¿cambiaste turno?
Hola Emi -ve al mayor- si, Niko necesita estar de tarde toda la semana y yo pues me ofrecí para trabajar en la mañana
Ah que bueno -se acerca y toma una manzana para darle un mordisco- por que no me avisaste que tenías turno de mañana, no habría traído a la chica anoche
-se encoge de hombros- no quería arruinar tu noche de conquista -le sonríe- ¿Quieres café?
Si, porfavor -se sienta en la silla y recibe su taza de café- pero dormiste tarde y ahora pareces mapache -ríe-
Pues si preguntan diré que tuve una noche un poco loca y pues por eso son las ojeras -ríe y se sienta al lado del mayor con su taza- aparte no es para tanto -le da un sorbo a su cafe-
-ríe- dudo que te crean que tuviste noche loca -lo ve y lo despeina- ahora si te creerán que tuviste noche y mañana loca
-ríe- deja mi pelo Marcos -se arregla el pelo- aparte antes de desayunar deberías de vestirte
¿Te pongo nervioso? -se levanta y hace como que se quita la toalla que está en su cadera-
No seas idiota -ríe- te he visto desnudo más veces de las que quisiera recordar -se prepara un pan- lo decía por si llega alguien
Pues no creo que llegue nadie -se acerca y le da un mordisco al pan que le menor tiene listo- ¿Te traumaste la veces que me has visto desnudo? -dice con la boca llena-
-rie fuerte al oír al mayor- en primero si quieres pan prepárate uno y no me vengas a babosear el mío -lo ve y le muestra la lengua- ¿Traumarme? No Emi, el maní no me trauma -ríe-
Pues con los que he estado no se quejan de que sea un maní -sonríe-
Es por que no te quieren dañar el ego -ríe y le da una mordida a su pan-
Oye -hace un puchero- no seas cruel conmigo
-sonríe y bebe de su cafe- la verdad duele querido
-ríe- te amo moco -se quita la toalla de su cadera y se la lanza al menor-
Emilio que asco -se quita la toalla de su cabeza y ve como el mayor camina- ni trasero tienes -ríe-
-se voltea a ver al menor- soy como los elefantes, cola corta pero trompa larga
-ríe- no seas idiota Emilio, lo único que tienes igual que los elefantes es el maní que traes
-ríe- idiota -entra a su cuarto a vestirse, ya cuando sale el menor está listo para irse a su trabajo- ¿Ya te vas moco?
Si -se coloca perfume y se acomoda el uniforme, camina hasta el mayor- cuídate baboso
También tú moco -le da un beso en la frente- saludos a los chicos
Ok -abre la puerta y luego voltea a ver al mayor- ¿Hoy tocarás con Roy y Diego?
-niega- no, aunque ya sabes aveces llegan y pues tocamos algo, te aviso cualquier cosa
-asiente- para pasar a comprar algo para comer, cuídate idota y no le abras la puerta a desconocidos
Y tú ve para ambos lados antes de cruzar la calle -le sonríe-
Si mamá -ríe y cierra la puerta caminando en dirección a su trabajo-
El día pasó sin novedad para los chicos, Joaquín al llegar al trabajo le tocó atender como cualquier día normal. Lo normal para Joaquín era que muchos clientes le decían piropos y eso ocasionaba que él se colocara nervioso y solo sonriera en signo de gratitud, aunque no faltaba quien creía que él devolvía el coqueteo y ahí el menor se sentía extraño y tendía a hacerse el sordo como que no oía lo que le decían. Emilio por su parte ese día sus amigos sí fueron a la casa y se pusieron a tocar guitarra y cantar para pasar un buen rato como ya era costumbre. Emilio vió la hora y decidió mandarle un mensaje al menor avisando que sus amigos estaban en la casa, Joa le respondió que pasaría a un Oxxo a comprar algunas cosas para comer luego.
Hola chicos -el menor abre la puerta y entra a la casa-
Hola Joa -Roy se acerca tomando las bolsas ayudando al menor- ¿Cómo te fue en el trabajo?
Hola Roy -le sonríe- bien gracias, vengo rápido voy a cambiarme de ropa
Te acompaño -dice Roy ocasionando que todos lo queden viendo- digo, te ayudo en la cocina mientras te cambias -su cara comenzó a tornarse un poco roja-
-sonríe y asiente- okey yo vengo rápido -va a su cuarto a cambiarse de ropa-
Que te pasa pendejo -Emilio se acerca a Roy-
Emilio -lo ve- perdón, era ayudarlo en la cocina
Roy te prohibo que te acerques a Joaquín con otras intenciones
Emilio tranquilo, a Joa lo veo como amigo, nada más
Más te vale Roy, con Joaquín no juegas
¿Por qué siempre actúas así cuando alguien se acerca a Joaquín? -Diego ve al castaño-
¿Que? -frunce el ceño-
Emi, cada que ves que alguien se interesa en él, saltas y te enojas -suspira y luego ve a Roy para después ver a Emilio-
Es por que es como mi hermano, no quiero verlo sufrir, lo he visto sufriendo mucho y no se lo merece -ve a sus amigos-
Emilio -suspira Roy- se que esto te lo debí haber dicho antes pero a mi me gusta Joaquín
¿Que? -el menor aparece ocasionando que los 3 voltean a verlo y los queda viendo- Roy ¿Que dijiste?
Joaco -traga saliva y suspira- yo... yo...
No le hagas caso moco, está bromeando -ve a su amigo- ¿Verdad Roy? -ve al contrato de forma seria y árquenlo una ceja-

ESTÁS LEYENDO
The Fuckboy
FanfictionEmilio Osorio y Joaquín bondoni son amigos desde niños, ya que el papá de Joaquín es el padrino de Emilio, siempre han tenido una relación de hermanos, es más Emilio siempre defendía a Joaquín ante todo aquel que lo atacara, así que decidieron irse...