Final Feliz (Regina Mills X Lexie Grey)

Capítulo 1

Regina pov

Cuando ya no pude controlarme más comencé a correr

-Regina- escuché a Emma gritar, no pensaba dejarla sola, pero podrá arreglárselas, no es como si no estuviera lo suficientemente grande, en estos momentos solo podía pensar en una cosa, ella.

Entré en el hospital corriendo y me gané un par de miradas curiosas, pero solo seguí corriendo hasta llegar al mostrador

-busco a la doctora Grey - dije mientras recuperaba un poco el ritmo de mi respiración, la enfermera apuntó detrás de mí, el mundo se detuvo un segundo y tomó toda mi fuerza de voluntad girarme, pero ella no estaba ahí

-doctora Grey- dijo la enfermera llamando la atención de una mujer rubia - la señora la busca- me apuntó

-¿en que puedo ayudarla?- dijo la rubia sonriendo mientras se acercaba, no, no puede ser - ¿está bien?- preguntó acercándose aún más

-si, no- dije rápido- ¿hay alguna posibilidad de que pueda hablar con la doctora Grey?- pregunté, ella rio suavemente

-esa soy yo - dijo

-Meredith - de repente un hombre guapo y rubio, se acerco a la rubia- creo que la señora busca a la pequeña Grey - la rubia pareció entender y asintió

-hola- dijo el hombre sonriendo, su sonrisa era perfecta, su actitud me hacía recordar a Graham- mi nombre es Mark Sloan, creo saber a quien buscas - yo no dije nada - puedo llevarte si quieres- asentí, cualquier persona que me lleve con ella en estos momentos será de mi agrado, seguí al hombre por un par de minutos cuando

-¿Regina?- la voz de Arizona hizo que mi cuerpo se relajara, estoy en el lugar adecuado, Zona corrió hacia mi y me abrazó, cuando se separó de mí preguntó

-¿que haces aquí? -

-te explico luego, ahora tengo que encontrar a...-

-se perfectamente a quién estás buscando, pero- su vista se desvió al doctor que me había traído hasta aquí y volvió a mí - tienes que...- dejé de escucharla cuando la vi, dio vuelta en un pasillo y quedó tras Arizona, empujé a la rubia con mi mano y la moví del camino, no me había visto aún, venía conversando con alguien, sonreía, eso me hizo sonreír a mí, aceleré el paso hasta estar frente a ella, cuando por fin me vio, abrió la boca para decir algo, pero antes de que pudiera decir algo la corte, elimine la distancia que nos separaba y junte nuestros labios, llevaba mucho tiempo esperando esto, sin embargo ella no lo respondió y se separo rápido de mí, mi corazón quebró en el acto

-Lexie - quería decirle tantas cosas, quería abrazarla y no dejarla ir nunca, pero nada salía de mi boca, las palabras se formaban en mi mente y quedaban atrapadas en el nudo en mi garganta para luego desaparecer

-Regina - escuche a Arizona a mi lado, desvié la vista de Lexie para mirar a mi al rededor, todos nos miraban, pero nadie decía nada, mi vista volvió a la chica que en estos momentos tenia mi corazón en sus manos y rogaba internamente por que no decidiera aplastarlo como yo hice con tantos en el pasado, su boca se abrió nuevamente, pero nada salió de ella, me pregunto si tampoco le salen las palabras o si solo esta buscando las adecuadas para decir lo que quiere decir -Regina, creo que deberías hablar con Lexie en otro momento - Zona hablaba, pero yo no me moví, no podía, las lagrimas caían por mi rostro a estas alturas, no las podía controlar, imaginé este escenario mil veces en mi cabeza, pero nunca contemplé la posibilidad de que ella no estuviera feliz de verme.

-lo logré -dije - te encontré - mi voz sonaba rasposa - encontré la manera de volver a ti - mi voz se quebró en medio de lo que intentaba decir y no sabía si me había entendido

-es muy tarde, tardaste mucho Regina - fue lo único que dijo y caminó pasando por mi lado, sentí la mano de Arizona en mi hombro y luego sus brazos rodeándome

-vamos, podemos hablar en mi casa- dijo sobando mi espalda y ese gesto que solía calmarme solo disparó mis nervios, significaba que algo estaba mal y no podía entender por qué, fue ella la que me besó y por eso terminé de vuelta en el Bosque encantando, comencé a caminar con Arizona hasta llegar a la entrada del hospital donde nos encontramos con Emma

-al parecer te fue bien- dijo al verme llegar con Arizona

-no seas tonta Emma, ella es Arizona, Arizona esta es Emma- dije presentándolas entre llantos

-hola Emma, podemos ir a casa si quieren-

-cualquier lugar menos este- dije aferrándome a su brazo

Lo siguiente que recuerdo es estar en el departamento de Arizona, sentada en el sofá mientras ella me ofrecía un vaso con agua, tomé un sorbo mientras ella se sentaba a mi lado, frente a mí estaba Emma, aún más desconcertada que yo, probablemente porque jamás había visto esta parte de mi, por eso no quería que viniera, sabía que algo saldría mal, siempre algo sale mal si tiene que ver conmigo, pero Emma insistió en que no quería que viniera sola

-¿que acaba de pasar? - dije más que nada pensando en voz alta

-Regina, mientras no estabas- tomó aire para seguir hablando- me cuesta tener que decirte esto- la miré directo a los ojos, ella asintió, no debía usar palabras para que entendiera que quería saberlo - Lexie conoció a alguien - nunca dejó de mirarme a los ojos, incluso cuando se llenaron de lagrimas

-¿quién?- pregunté, estoy segura que estaba ahí cuando la bese, por eso no me lo dijo ella, tal vez el hombre con el que venia caminando cuando la vi ¿por eso sonreía?

-Mark, el doctor con el que estabas cuando te encontré- dijo y en mi mente podía imaginarme borrándole esa estúpida sonrisa de la cara, no dije nada, nadie lo hizo, desde el pasillo se oía una risa que rompía el silencio con la misma rapidez con la que se rompe un cristal

-entonces está completa extraña que entró corriendo al hospital interrumpió la conversación con Arizona y besó a tu novia - dijo en tono de broma una voz femenina mientras abría la puerta principal

-no es una broma Callie, puedes preguntarle a Arizona - ambos se quedaron en la puerta cuando nos vieron en la sala, me pare rápido

-tú- dije mirando al hombre y lo pegue a la pared mas cercana, sus pies no tocaban el suelo y hacia ademanes de querer sacarse algo del cuello, como si alguien lo estuviera ahorcando - eso no va a funcionar- dije mientras me acercaba.