❣ Cupido ❣ [m.y.g + j.h.s]

💌06💌

Como cada fin de semana, recorrió el camino hacia la casa de Yoongi, para dejarle su acostumbrada lonchera -la cual siempre aparecía en su casillero misteriosamente- añadiendo una nota en ella.

"Te demostraré que soy capaz de hacer hasta lo imposible por ti. Hoseok"

Aunque sonaba a declaración amorosa, al pelirrojo no le importó, besando la nota y acomodándola de tal manera que no fuera a perderse. Presionó el timbre y simplemente se marchó, ocultándose a observar si Yoongi salía esta vez.

Una señora mayor, con uniforme de servicio, apareció en su lugar, tomando el atadito y hablando hacia el interior.

—Señor Min, ha llegado algo, ¿qué hago con él?

—¡Dámelo! —Yoongi apareció, agitado como si hubiera corrido escaleras abajo. Hoseok sintió que su corazón volvía a latir con fuerza. Él había recibido cada uno de sus pequeños presentes. —¡Y cada vez que llegue uno de estos, lo llevas de inmediato a mi cuarto! —le explicó con severidad a la pobre mujer, aun en la puerta de la casa. —¿Quedó claro?

—Sí, señor Min —dijo ella, obediente, haciendo una reverencia. —Por cierto, la cena está lista, ¿cenará?

—No, gracias... Yo no ceno —dijo él, desapareciendo nuevamente.

Una boba sonrisa cubrió el rostro del pelirrojo con el hecho de saber algo tan simple como que todo el esmero que ponía en ello, no era en vano. Tal vez, en la escuela lo ignore todo el tiempo, pero eso ya no le importaría más, porque estaba seguro que no lo odiaba del todo.

Al llegar a casa, sacó todos los libros que poseía de álgebra y matemáticas, poniéndolos sobre el escritorio. También encendió su ordenador, ya que había oído que en la web se podían hallar videos explicativos bastante buenos.

Pasó aquella noche con los ojos abiertos gracias a una gran dotación de café, y un objetivo en mente, Yoongi.

Lamentablemente, no logró comprender nada, lo cual lo frustró a tal punto, que estuvo a nada de lanzar todo por la ventana, acabando con la tortura que le significaba estudiar, completamente a ciegas.