Cositas En Venta 2 (TERMINADA)

Papá perfecto y...

...algo fastidioso

Tengo una noticia buena y una noticia mala. La buena: era fantástico que papi estuviera en casa. La mala: que era horrible que quisiera ser el papá perfecto. Les voy a explicar.

Antes, antes.... Me gustaba mucho hacer cosas con mi papi, era gracioso, tenía sentido del humor y la pasábamos bien juntos. Pero desde que el gran Leon Carvajal decidió convertirse en perfecto, siempre estaba preocupado por algo o leyendo libros horrorosos de esos de educar a los niños que le ponían creo de muy mal humor.

La primera noche después de cenar y lavarme mis dientitos, le pregunté si podía usar mi computadora, él estaba sentado en el living medieval, leyendo un libro "Los niños y las pantallas", levanto la cabeza y me vio con sus bellos ojos verdes y entonces me dijo:

–Seria bueno, pero mucho mejor es que le des comida a tu perrita

–Pero me gustaría hablar con Juls, quedamos en escoger el nombre, y tengo que revisar mi correo...–Protesté

–No Valentina! La computadora es para trabajar o estudiar, y a partir de ahora su uso será para eso y estará limitado

Casi me infarto, eso no me dio buena espina, y lo peor de todo es que era el principio de mi pesadilla. Al día siguiente no me quedé a comer en el colegio, como lo hacia siempre. Papá decidió que almorzáramos juntos en casa, cuando llegué estaba para variar leyendo otro libro "La cocina de las verduras, mil recetas divertidas" , y en la mesa había un plato con brocolí, pollo blanco casi muerto, y unas zanahorias.

–No me gustan las zanahorias

–A mi tampoco, pero hay que comer de todo

Juro que estaba empezando a sufrir del corazón con tantos micro infartos, nos sentamos en la mesa, estaba triste no pude compartir con Juls, lo hacíamos mientras comíamos, y de paso esas zanahorias. Papá bebía mucha agua y ponía cara de asco, él cree que yo no me di cuenta, pero al final se las comió todas, fui a la nevera a buscar el postre, mis vasitos de chocolate y no había ni uno, NI UNO!

–Comeremos frutas, se acabó el chocolate

–Pero papáaaa! El chocolate es mi comida favorita, una vida sin chocolate es como una peli de piratas sin un malo feo y vengativo... Y ahora eres ese malo feo conmigo.

–Y también terminaron las clases extraescolares, ahora yo cuidaré de ti, no hace falta que te quedes tanto tiempo en la escuela.

–Pero me gusta hacer teatro

Me acarició el cabello y me quito una lagrima...–En vez de eso, haremos los deberes juntos, y después saldremos a dar una vuelta con tu perrita y a caminar, será fantástico.

¡Odio caminar! O sea, caminar sin sentido en concreto, no me gusta eso de salir a ver el aire. –Pero me perderé mi cartoon favorito!

–Ya Valentina! Se acabo ver la tele y toda esa perdedera de tiempo, y veremos cartoons pero serán en inglés, y serán cada dos días.

Miré hacia la mesa y la tele había desaparecido, en su lugar había un ramo de flores todas colorinchis. –En ingles? Pero no voy a entender nada

–Ya te acostumbraras, además así aprendes, después leeremos unos treinta minutos, todo eso es lo que recomiendan los expertos

–Y que pasa si quiero leer mas tiempo?

En ese momento se quedó sorprendido, no esperaba esa maravillosa jugada mia, pero es que adoro leer, se quedó pensando un momento y me dijo –Tendré que consultarlo

Pero esto era increíble, de verdad una pesadilla horrible, y para rematar me dijo que se había apuntado al grupo de padres de la escuela.. Otro infarto!

–Que vas hacer allí?

–Organizar actividades, tienen mucho trabajo

Pero bueno Dios mío!!!! No quería ni pensar que ocurriría cuando mis compañeros del colegio vieran a mi papá en el patio. Muchos no saben que su programa de concursos se acabó, y que esta sin trabajo.

–Para empezar....me orecí como voluntario de las excursiones, me van avisar, al parecer no hay suficientes representantes disponibles para ese departamento, entonces iremos de excursión muy pronto... mañana mismo iremos de compras para mis implementos.

Buuuf!!! Bueno seguro seria igual de horrible que mi nueva vida en este castillo medieval, salí al jardín a jugar con la perrita, era hermosa chiquita pero grande, peludita y tenia ojos de colores, uno azul como los míos y uno marrón como los de Juls. Debía hablar con mi amiga para escoger su nombre, pero papá no me dejaba, y de pronto me acordé de cosas buenas cuando estábamos juntos, a veces los fines de semana íbamos algún sitio divertido, como el acuario, el zoo o el teatro, a lo mejor volveríamos a eso, y me empecé a reír recordando el momento de los cuentos antes de dormir, papi no tiene nada practica en eso de contar cuentos, y además tiene malísima memoria, entonces decidió que lo mejor sería inventar los cuentos.

Son unas historias loquísimas jajajaj, por ejemplo:

–Erase una vez un lobo pelirrojo al que todo el mundo llamaba coloradito, una tarde cuando el lobo iba a visitar a su abuela que vivía en el medio el bosque, una niña que se llamaba Valentina, llevaba una caperuza roja se le apreció y ayudada por siete enanitos traviesos, se llevó al lobo y entre todos lo metieron en su casa y prepararon el horno para cocinarlo... pero del horno salieron tres cerditos medio cocinados y soplaban y soplaban para parar el fuego del horno, soplaron tanto que derrumbaron la casa de Valentina, y así todos pudieron escapar y Valentina y su papá se quedaron sin cenar y tuvieron que comer verduras con salsita, y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Fantástico!!!!

Con mucha diferencia del cuento original, pero era su cuento no perfecto, cuando mi papá no era perfecto.

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