FROZEN: THE OTHER REALITY

Capítulo 3

Anna y Kristoff se quedan mirándome en silencio, luego de que este último dijera el nombre del nuevo sujeto.

- ¿Que opinas? - me pregunta Kristoff con cautela.

- ¿Que opino? - pregunto extrañado - ¿Que opinas tú? - digo dirigiéndome a Anna.

- ¿Cómo? - pregunta ella sorprendida.

- Este es tu reino, tu y tu hermana deciden sobre el, no yo - digo con seriedad.

- Pero también es tu hogar - me dice Anna.

Yo solo le doy una pequeña sonrisa y me doy vuelta para mirar hacia fuera de mi balcón, todos conservamos el silencio por unos minutos, hasta que escucho a alguien entrar, me giro para ver quién es y veo a Sven y Olaf entrando.

- Aquí están - Dice Olaf.

- Hola amiguito - le digo dándole una sonrisa.

- ¿Por qué todos parecen tristes? - pregunta con curiosidad.

- No estamos tristes - dice Anna.

- Solo hablábamos - le dice Kristoff.

- Oh hablaban del tipo que Elsa dice que nos ayudó en aquella ocasión y que parece tener algo en contra de Mestre ¿Verdad? - dice con seguridad.

- Em si... - le responde Anna.

- Si es que ví lo que pasó en el comedor - dice sentándose en el suelo.

- Muy bien, no quiero que nadie se preocupe por algo tan absurdo, no crean que alguien así puede llegar a prenderme - les digo con firmeza.

- Se que no hermano - me dice Kristoff con seguridad.

- Yo solo espero que eso no te haga cambiar de actitud - me dice Anna con preocupación.

- Claro que no, si el les ayudo en su momento, estoy más agradecido que cualquier otra cosa - les digo seriamente.

- Muy bien entonces eso es todo - Dice Kristoff - me iré a dormir.

- Te amo Mestre - dice Anna lanzándose y dándome un abrazo.

- Y yo a ti, ve a descansar - le digo con cariño.

Ambos salen de la habitación y Sven se va tras ellos.

- Por suerte se fueron - dice Olaf.

- Y ¿tú no irás a dormir? - le pregunto con curiosidad.

- No me quedaré contigo hasta que te sientas bien - me dice con seguridad.

- Amiguito me siento muy bien, no pasa nada - le digo dandole una sonrisa.

- Es que el te trato mal, tú no nos abandonaste, fuiste a ayudar a unos amigos.

- Así fue y mientras ambos pensemos lo mismo, sabremos que las palabras de el no tienen sentido - le digo con cariño.

- ¡Si! Tienes razón - dice dando un brinco - muy bien entonces me iré a dormir, ¡Descansa! - dice mientras sale de mi habitación.

Yo sonrió levemente al ver a Olaf salir de mi habitación y me dirijo a cerrar la puerta, la cierro con llave y tomo uno de los muebles que tengo en mi habitación para llevarlo hacía el balcón, lo acomodo y lo reclinó para poder recostarme a mirar el cielo, en vez de pensar en lo sucedido recuerdo el pasado, recuerdo estás noches en que era mi familia, el fuego y yo, pasábamos momentos realmente agradables, pero esos momentos ya no están, ahora estoy aquí y debo sobrellevar las cosas que me suceden en el presente, aunque por ahora solo quiero descansar, cierro los ojos y al cabo de unos minutos logro quedarme dormido.