sᴇʀᴇɴᴅɪᴘɪᴀ

¡¿Hermanastros?!

Debbie estaba en su habitación como siempre, estaba escuchando una canción de "blink-182" más específicamente "No heart to speak of" dibujaba al mismo tiempo en su libteta.

"Lying on the bedroom floor
Hanging on the words that you said before
No heart, no heart to speak of
Dying on the bathroom floor
Thinking of the life that we had before
No heart, no heart to speak of"

Justo antes de terminar el coro de la canción, entró la mamá de Debbie, la señora Julia (nombre basado en el grupo "t.A.T.u.") hizo que la joven diera un salto por el susto hasta caer al suelo.

- ¡Mamá! Toca al entrar, ya te lo he dicho.
- Lo siento, cariño, te tengo una sorpresa abajo en la sala de estar.
- ¿Sorpresa?
- Así es, ven conmigo
- Está bien...

La señora Julia salió de la habitación mientras Debbie caminaba detrás de ella, bajaron a la sala para encontrarse con un señor algo alto, vestido con un pantalón gris poco ajustado, unos zapatos vans negros y una camisa del mismo color, detrás suyo se veía una figura indistinguible a la que Debbie ignoró, se puso al lado de su madre espectando al señor en frente suyo para después voltear con su madre viéndola con una cara de confusión, ladeando un poco su cabeza.

- Y bien, ¿Cuál es la sorpresa?
- ¡Sorpresa!

Su madre pronunció un tanto nerviosa señalando con ambas manos al señor frente suyo mientras miraba a Debbie, esta abrió los ojos como platos mirando al señor y luego a su madre repetidas veces y tapó su boca con una mano.
Su madre consiguió pareja después de diez años estando soltera, no lo podía creer.
La figura detrás del señor se asomó, haciendo que Debbie de un paso hacia atrás, era...

- ¡¿La emo?!
- ¡¿El skater?!
- ¿Ya se conocían?
- Seran hermanastros.
- ¡¿Hermanastros?!

Gritaron al unísono al escuchar las palabras de sus padres, claro que se conocían, habían tenido varios choques inoportunos por el parque durante semanas, se ganaron el odio el uno del otro.