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Ambos se pusieron ropa para dormir, SeHun un short y una camiseta blanca y JunMyeon un short y camiseta gris mientras estaban en la habitación del menor.

JunMyeon se alistó para dormir y quiso salir del cuarto pero el menor no le dejó.

—¿A dónde vas?

—Pues al cuarto de visitas, ahí es donde duermo yo.

—No no, vas a dormir conmigo.

—No SeHun.

SeHun apegó su pecho contra la espalda del mayor mientras que ponía una manta encima de ambos.
Rió suave al recordar las palabras de JunMyeon y al verlo ahora ahí, acostado con el.

A la mañana siguiente, el menor despertó y con una almohada y manta en mano se dirigió a la habitación en donde se supone debería estar JunMyeon dormido. Extrañado y curioso, con claras intenciones de preguntarle a su hermano el paradero del mayor se dirigió a su habitación y giró la manija para después abrir la puerta, luego divisando al mayor recostado y dormido sobre el pecho de su hermano.

Esbozó una sonrisa divertida antes de arrojarles su almohada y despertarlos.

—¿JunMyeon hyung y tú se dieron besitos anoche? -cuestionó divertido antes de volver a cerrar la puerta, dejando al par algo tímidos por haber sido vistos de aquella forma.

JunMyeon soltó algunas risas y decidió ponerse de pie.

El fin de semana desde ése sábado al lunes pasó en un abrir y cerrar de ojos, días en los que JunMyeon se empeñaba en dejar la casa reluciendo de lo limpio que había dejado para que el hombre que volvería no tuviera que regresar y limpiar o algo similar.

Ése lunes por la tarde regresaba.
Mientras, Yixing estaba en el aeropuerto de otra zona para viajar de regreso, su vuelo salía a las 2:00 p.m y suponía que para las 5:00 en punto estaría ya cerca de casa.

Su celular sonó y el número que reconoció al instante era del teléfono de su casa, así que inmediatamente contestó por si era una emergencia.

—¿Ho-Hola?~

Habló esa linda voz que había escuchado hace ya cuatro días, lo cual lo puso feliz al instante.

—Oh, hola JunMyeon, ¿Sucedió algo, necesitan algo?

—Ahh no en realidad, llamaba para ver cómo estaba, y, quería saber la hora en la que estará aquí, nada más. -dijo, con la voz temblorosa y la mano temblándole igualmente.

—Qué grato es escuchar tu voz.
Ahora mismo estoy en el aeropuerto, creo que a las 5:00 con algunos minutos estaré ahí. Y todo salió muy bien. ¿Qué tal las cosas por ahí?

—Todo está muy bien y-

—Todo está bien, papá, cuídate mucho. -se escuchó la voz de SeHun e inmediatamente terminó la llamada.

Frunció el entrecejo por la curiosidad y guardó su móvil sin darle importancia al asunto.





—SeHun, ¿Porqué te comportas así con tu papá? Qué grosero eres. -respondió un poco molesto mientras lavaba unos platos en el fregadero.

—¿Crees que te dejaría hablar con mi papá luego de saber que te habías enamorado de el? Todo está bien así, ¿Crees que no sé cómo te pusiste al oírlo? -dijo, sin mencionar de más antes de rodear su cintura con los brazos en un agarre fuerte. —Tú eres mío.

—¿Cuándo estuve de acuerdo con eso? -dijo volteando a verle.

—Uh, ¿Cuándo lo hicimos? -cuestionó con sarcasmo.

Los hijos del señor Zhang. » HunHo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora