Intentos de Idiotas

CAP 4 ("Superación")

Samuel Hyuston. A nadie le gustaba era muy poco atractivo para absolutamente todo el mundo, menos para mi. Samuel era el chico de ojos verdes con vistosas pecas debajo de ellos, era gracioso en su cierto modo la gente decía que era tonto aunque en realidad no, una persona q hace tonterías no tiene porque ser tonto, el era muy inteligente no se le daban bien algunas cosas pero todavía estábamos aprendiendo a que hacer con nuestras vidas, íbamos a sexto tendríamos entre 10 y 11 años. Empecé a relacionarme con él gracias a Alice Crown le gustaba uno de sus amigos y resulta que yo soy amiga de mis amigos, Alice estaba colada por Alessio y era uno de los que estaban en el grupito de 3 de Samuel. Eran Alessio de él que estaba pillada Alice, Mich y Samuel era indescriptible como era.

Después de quinto no volví a ver a Samuel ni a ninguno de mis amigos, me fui a el 25 de septiembre, el colegio del cual estaba posicionado en el barrio en el que vivía mi hermana. Estuve rebotando entre grupos de amigos que tenían hechos en el 25 estaban los típicos de los popus, los frikis, las amigas morenas y esas cosas me costó adaptarme hasta que conocí a Lorein reik. Ella era una chica rubia de ojos miel, y fan del baile aunque no era una de sus mejores cualidades. Lorein fue agradable aunque me costó encajar ya que mi prima Andrea siempre había sido insoportable conmigo, ella empezó a hablar muy mal de mi hasta antes de entrar en el colegio después de bastante tiempo acabe adaptándome aunque todo me daba vergüenza hablar con cualquiera o hacer actividades de grupo era insoportable para mi era completamente incómodo aunque aceptable. Habían excursiones y mis compañeros de clase eran agradables excepto uno. Jhona era el tipo de chico que cree que da gracia haciendo cosas aunque en realidad no una vez me tiró una silla sin exagerar y me partió el labio, soy aprensiva a la sangre creo q ya se sabe cómo acabó. (Spoiler: me desmayé en medio de clase). Si era la chica nueva que se había desmayado en el suelo y no, no vino ningún tipo de príncipe o superwoman a salvarme. Estaba en el suelo con los pies hacia arriba para volver a la conciencia. Hizo muchísimas mas cosas porque un año da para mucho...Pero no quiero aburrir con cosas de abusones de la primaria. Aunque refiriéndose a como príncipe había 2 chicos que eran muy príncipes como tal, uno muy fuera de mi alcance y otro que me costó hasta fin de curso darme cuenta en si. ¿Distraída?, No que va no seré yo esa. Carlos era un chico de ojos azules con gustos de la moda y casi con los mismos gustos que yo era como si fuésemos hermanos o de esas personas que parece que se conocen de toda la vida y saben todo uno del otro.

-Hey Rachel estas bien? -Pregunto Carlos-

*era tan amable -pensé- con la vista a medio volver en el suelo*

-Si Carlos, que a pasado?

-Estás en el suelo -contestó-

Madre mía me quería morir, tenía el rostro de Carlos a simples centímetros de él míos, que labios tan delicados- pensé-

O eso creía porque además de estar en el suelo dije en voz alta que tenía unos labios preciosos. Carlos se sonrojo como es normal en una situación así, al menos solo me escuchó él ,si no...hubiese sido lo peor que podría haber hecho en todo el curso de sexto que me quedaba. Tiempo después de eso fue muy incómoda la situación pero decidimos ignorarlo durante una semana aunque un día sucedió deberíamos de hablar de ello porque no salía de ninguna de nuestras cabezas aquella frase.

*En el patio*

-¡Nunca he besado a nadie! -Exclame-

-Yo tampoco! -dijo con alivio Carlos-

- Creo que somos de los pocos que no se han rozado los labios nunca.

- Diría que si.

Sentí mis mejillas arder en el momento en el que me di cuenta de que creí que le había propuesto que acogiera mi primer beso. Nuestro primer beso.

Emmm Carlos no creo que e e e sea eso lo que...

No tuve tiempo a reaccionar sus labios no tocaban los míos pero sentí su respiración tan cerca que se notaba como una cálida brisa de verano. Pero nuestros labios no llegaron a rozar en ningún momento, nuestros ojos conectaron con el color aguamarina de los suyos y mi verde acaramelado de los míos cuando menos cuenta me di sus labios se aproximaban aunque pensé en ese instante momento. Lo esquive sentí que no era apropiado. Sabía que otros labios me esperaban ,los correctos esos que sabía que me deseaban al igual que a mi.