𝑵𝒐 𝒑𝒐𝒅𝒆𝒎𝒐𝒔 || ᵂᵒˢᵃⁿⁱ

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Maratón 1/...

Narra Dani:

Me desperté en mi habitación con un poco de dolor de cabeza. Matias y los pibes me había dejado en mi casa ayer de pasada. Con toda la paja del mundo me levanté de la cama a lavarme la cara junto a mis dientes, me cambié la remera y me dirigí hacia mi cocina en busca de alguna pastilla o el mágico paracetamol que guardaba mi madre en los estantes de arriba.

"Arriba al costado de los platos, arriba al costado de los platos, arriba al costado de los platos".

Repetía en mi cabeza una y otra vez mientras me subía a la mesada de la cocina para ayudarme ( por qué ✨enano✨) y abría con delicadeza los cajones.

- Ribba, tenemos que hablar... - escuche la voz de mi madre a mis espaldas haciendo que casi me caiga de la mesada al piso por el susto.

Reaccioné poniéndome una mano en el pecho como vieja dramatica y estabilizando mi equilibrio, pensando algo asustado.... ¿"Tenemos que hablar"?...

¿Que cagada me mande ahora?

¿Encontró los puchos en mi cuarto?

¿Las flores?

¿Los forros?

¿Los usados?

¿Mis nudes?

Imposible eso... ¿No? Si las tengo guardada en Snapchat con clave...

Esperá, me estaba hablando mi madre.

- Decime - dije agarrando el frasquito y bajandome por fin de la dichosa mesada aparentando tranquilidad aunque si fuera por mí estaría temblando.

Mi madre me miró y trago saliva sin saber cómo empezar.

- Soltalo querida, como te salga - dije sirviéndole un poco de agua del sifón y tragandome la pastilla con esta - ¿Que paso? - repetí.

- Quiero saber quiénes son tus nuevos amigos... Y más a él flaquito que le haces ojitos - dijo mi madre mirándome - ¿Desde cuándo tenés amigos que andan en auto?, a Mauro si no me acuerdo mal le sacaron la licencia de la moto el año pasado y Paulo no tiene auto.

- Matías es el que "anda en auto" - hice comillas mirándola y bufé - Es amigo de Valen... Y yo no le hago ojitos "al flaquito" de Valen - dije y sentí el minuto de silencio que me dio mi madre sabiendo que le mentia - Bueno si le hago ojitos, pero por qué esta re bueno - di vuelta mis ojos mirándola - Hasta Milagros, la hija de la hermana de papá, que es re torta, lo fichó también... No me culpes por tener buen gusto mamá.

- Y ese chico, Matías ¿Tiene licencia?... Por qué para tener licencia tenés que ser mayor - insinuó lo que quería preguntarme desde que apareció en la cocina.

- Si tiene licencia, tiene 20 años - dije mirándola y subiendo los hombros sin saber que más decirle.

- ¿20? Parece mucho mayor... Y ese tal Valentin ¿Cuanto tiene? No me gusta que estés con gente muy grande, Paulo si, por qué es muy responsable y bueno, lo conozco bien - dijo ella con una mueca de inseguridad - Pero yo ya no conozco más tus amistades nuevas... No es como antes que conocía a la madre de todos y sabía cómo eran masomenos para quedarme tranquila.

- Tiene la misma edad, 20... 3 añitos ma', entre los pibes no son nada - saqué una sonrisita intentando verme creíble - Tranqui... Es un buen pibe.