Y si quiero?

Grupo de traidores

Me quedé descuadrada. Ese niño arrogante y pretencioso iba a ser mi jefe! A partir de ahora le debía respeto y cada orden que diera debía acatarla sin protesta.

Mierda. Podría haber algo peor?!

Habían pasado ya 12 minutos exactos. No había podido decir nada ya que el simplemente se fue del cuarto y yo tuve que sentarme y respirar profundo, porque sino me iba a dar un infarto. Habían llegado todos los demás de la biblioteca según Kamala y el se había presentado. Al parecer muy serio y cordial. Me contó que no faltaron los suspiros de Asia y Kate. Las chicas que se encargaban de las redes sociales eran muy hermosas a mi parecer. Ambas blancas y rubias aunque Asia tenía ojos azules y Kate ojos marrones. Se veían como el tipo de chicas tontas, pero eran todo lo contrario, un poco pijas sí pero tenían mucha cultura más asociada al mundo del Internet pero algo de literatura saben.

Bueno él ya se ganó a esas dos, pero a los chicos no creo. Ellos son mi esperanza. A parte de Shallon, estaban Dionisio, Eric y Zack.

Dio se encarcaba de las cargas y trabajos pesados con ayuda de Shallon por supuesto. Eric de la contabilidad e ingresos del museo y Zack de la parte de la biblioteca de prestamo de libros y organización junto a mí.

Esperaba que almenos le dieran guerra y el chiquillo se fuera con la cola entre la patas.

Volví a suspirar y me di algunas palmadas en los cachetes. Debía ponerme a trabajar.

Subí al tercer piso, habían más personas en el museo de lo que acostumbraba a ver. El segundo piso estaba abarrotado de gente y en el tercer piso, el que siempre fue el más tranquilo de todos parecía que Harry Styles y Justin Bieber estaban dando autógrafos.

Habían tantas chicas que solo se escuchaban chillidos femeninos.

Ya me estaba dando el tick nervioso. Acomodé mis gafas y fui directo a donde empezaba el tumulto y era nada más y nada menos que mi oficina. Vaya el escritorio y una lámpara...mi oficina y estaba siendo usada por el demonio y las mujeres a su alrededor riendo y murmurando.

Ya no estaba en mis cabales, al rubio macizo estaba a punto de darle una ostia y caminando a pasos agigantados llegué dando un golpe zordo con las dos manos encima de la antigua madera.

Joder que silencio más hermoso se hizo.

Él en ese momento dejo de tocar con sus sucias manos los papeles y levanto la vista. Cuando sus ojos se encontraron con los míos pude ver cierto brillo en ellos,seguro por la lámpara, sonrió.

Yeram: Hola Blaur, que te trae por aquí?

Bleur: Levántate de mi silla!

Yeram: Oh!-miró sus alrededor con una cara de fingida confusión- esta es tú oficina?

Bleur: No te hagas el memo y sal de mi silla- volví a dar un golpe esta vez inclinandome más sobre la mesa.

Yeram: Ups! Lo siento, no lo volveré a hacer.

Bleur: He? Qué?!

Se levantó y rodeo el escritorio y se apoyó acercando su rostro al mío. Intente alejarme pero me sostuvo de la mano tirándome hacia su pecho. Respiro profundo cerrando los ojos( porque tenía que verse tan sexy haciendo algo tan maldita mente enfermo)

Yeram: Bleur -tomo un mechón de mis risos rebeldes que se había escapado de mis moños colocandolo detrás de mi oreja- no soy tu enemigo, así que no me trates como tal.

Y se entretuvo acariciándome la cara con sus dedos, hace casi 24 horas que lo vi por primera vez pero siento que algo me empuja a dejar que haga este tipo de gestos.