Cap. 2

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-Disculpa ¿como dices niña?- preguntó el castaño ante la petición de aquella jovencita.

-¿Que si me dejaría hacer unas pasantías en su restaurante?- volvió a repetirle la chica Jordan.

-¿Eso es algo de la escuela?

-Así es señor, verá elegimos materias selectivas en la escuela y yo decidí probar con cocina- explicó la jovencita.

-Entiendo, mi hija también tuvo una de esas materias selectivas y casualidad le tocó lo mismo que a ti- acotó Lynn padre- De todas formas esa materia la puedes hacer desde casa, no es necesario que vengas a un restaurante para que te enseñen.

-Lo sé señor, pero mi mamá trabaja todo el día y no me puede enseñar.

-Y que me dices de tu papá ¿él tampoco te puede enseñar?- preguntó por mera curiosidad Lynn padre.

-Es que yo....- hizo una pequeña pausa Jordan- yo no tengo papá- finalizó con la mirada baja.

-Lamento oír eso no tenía idea, esta bien mira te ayudaré con tus pasantías- cambió rápidamente de tema el chef- Pero antes te haré una pequeña prueba.

La niña Jordan subió la mirada y asintió con la cabeza.

-Si tienes tiempo ahora o si lo prefieres el domingo...

-Tengo tiempo ahora mismo señor- le interrumpió con entusiasmo.

-Muy bien, te quedarás y me ayudarás en la cocina con algunas cosas- dijo Lynn.

-Entendido señor- respondió la chica, afirmando con la cabeza.

Lynn le hizo una pequeña seña para que le siguiera, en el camino le hizo saber a su amigo Kotaro; para que no hubiera algún malentendido con el personal; que la chica estaría haciendo unas pasantías por algunos días. Teniendo en cuenta el tiempo que estuvo con Luan, serían alrededor de 4 semanas. Jordan seguía tímidamente al hombre que accedió a enseñarle, miraba todo su alrededor para ir acostumbrándose al lugar, principalmente en la cocina, donde al ingresar se sorprendió al ver lo perfectamente organizado que estaba todo, las verduras lejos de los hornos, los alimentos no perecederos separado de los frescos, las especias bien organizadas y los utensilios de cocina bien acomodados.

-Muy bien..... hemmm- se detuvo a mitad de la cocina- ¿Como me dijiste que te llamabas?- preguntó Lynn al no recordar su nombre.

-Jordan señor, Jordan Rosato- respondió la joven castaña y luego agregó- Pero todos me dicen "Jordan niña".

-¿Y eso a que se debe?, digo se nota a simple vista que eres niña para tener que hacerle énfasis.

-Es que también hay un "Jordan niño" en la escuela y para saber a quién se dirigen, todos hacen esa pequeña énfasis- explicaba "Jordan niña".

-Bueno te diré Jordan solamente, por cierto yo me llamo Lynn Loud- se presentó el mayor recordando que hasta el momento no le había dicho su nombre.

-¿Loud? ¿Usted es el papá de Lincoln Loud?- esta vez preguntó al escuchar ese apellido tan familiar.

-Asi es ¿se conocen?

-Somos compañeros de clases.

-Esto si que es una linda coincidencia- acotó con una sonrisa Lynn- Ok Jordan bienvenida a la cocina, espero que podamos llevarnos bien y que estés dispuesta a aprender como yo lo estoy para enseñarte.

-Si señor estoy más que dispuesta para aprender el arte de la cocina- respondió Jordan con entusiasmo.

-Me alegra oír eso, porque tengo una tarea especial para ti.

La aprendizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora