Tímido🔞
El vaivén de la música retumbaba en mis oídos, mi corazón golpeaba contra mi pecho y mi vista podría traicionarme fácilmente, hace rato había confundido al bartman con una columna y casi me le tiro encima.
Seguía preguntándome en que momento me pareció buena idea acompañar a mis amigos a un boliche gay, todos mis amigos eran homosexuales, y aunque yo lo había considerado me identifiqué como bisexual.
La verdad es que me gustaba bastante el ambiente, la musica y el lugar, pero para mi mala suerte cuando me encontraba hablando con un chico bastante lindo, con ojos verdes y cabello castaño rojizo, me llegó un mensaje de mateo.
Mateo:
eu dani necesito q vengas a ayudarme
Manu se desmayó y valen fue a traer el auto, ayudame a cargarlo
Asustado corrí hacia la zona donde los había visto por última vez, no se encontraban allí pero por suerte estaban cerca. Miré preocupado a Mateo y este me hizo un gesto de que despues me explicaba, agarré a Manuel de los pies y él de los hombros y la cabeza. Lo acostamos en el auto de Valen y él lo llevó a la casa de su madre hasta que se le pase la borrachera, prometiendo volver a la joda. Aprovechando el momento me senté al lado de Mateo y lo miré tratando de pedir explicaciones con los ojos, creía que me había entendido pero en vez de explicarme se levantó de su silla y se fue al baño incómodo, tal vez no quería hablar.
No entendía nada de lo que había pasado, solo que ya no tenía lugar donde dormir, o al menos eso creía, hasta que ví a Valentín sentarse frente a mi y mirarme con un gesto de "y a vos que te pasa?", carraspeé y con vergüenza lo solté
-No tengo donde dormir hoy
-Te va a tocar dormir en la calle —respondió burlón y río— no, no es en serio, vení a mi casa eu
Lo pensé. Lo pensé dos veces. Lo pensé tres veces. Y con pena accedí.
Nos despedimos de Mateo, el cual estaba preocupadisimo por su amado, ellos no son nada pero se nota que se tienen ganas aunque ambos lo nieguen. Aún avergonzado subí al auto de Oliva y observé sus facciones de perfil mientras manejaba, todavía me costaba entender porque me daba tanta pena pedirles favores a mis amigos, sin darme cuenta me quedé colgado pensando con la vista hacia el mayor, típico de mí tildarme mirando lugares que no debo, aunque siendo sincero no me hubiera dado cuenta de lo que pasaba si la voz de Valentín no me hubiera sacado de mis pensamientos.
-Che que onda? Tan lindo soy que me miras? —rió mirándome y luego volvió la vista hacia la calle—
No sabía bien porqué pero esas palabras me habían puesto nervioso, me reí para que no sea tan tenso y el resto del camino nos quedamos callados.
Al llegar bajé del auto y cerré la puerta con cuidado, va, me parecía haberla cerrado con cuidado
-Eh mas despacio cerrala gil que te pensas que es indestructible?
Me disculpé y sentí mis mejillas enrojecer, odiaba ser tan avergonzado y no poder hacer nada sin sentirme así.
Entramos a la casa de Oliva y automáticamente nos acostamos sobre el colchón, estaba cansado pero no tenía ganas de dormir, asi que propuse mirar una película, propuesta la cual Valentín aceptó.
Pusimos la película "X-Men" pero no lograbamos concentrarnos, teníamos las miradas puestas en nuestros ojos, y apenas bajé mis ojos a sus labios él unió nuestras bocas en un beso, un beso cálido y húmedo, que luego fuimos transformando en uno mas intenso y apasionado, fusionando nuestras lenguas y haciendo un jugueteo con ellas, provocando un fuego que se sentía en el ambiente.
La verdad es que Valen me conocía mejor que nadie y siempre lo negabamos pero ya varías veces habíamos garchado estando en pedo, aunque algunas de esas veces Valentín estaba tan ebrio que no lograba recordar si pasó algo o no, al contrario de mí, que recordaba hasta el más mínimo detalle.
